- El brote de coronavirus ha desencadenado la demanda de activos de refugio seguro.
- Se ha visto un patrón similar con la crisis de Irán y puede reaparecer a lo largo de 2020.
- Cinco activos financieros destacan en estos tiempos de problemas.
Ya sea que se origine en Wuhan o Irán, los mercados financieros siempre tienen algo de qué preocuparse, pero la demanda de activos de refugio seguro está cambiando.
El brote de coronavirus más reciente ha estado acaparando las noticias desde mediados de enero y probablemente durará más. A pesar de la poca capacidad de atención en la era de las redes sociales, detener la enfermedad probablemente llevará algún tiempo, y los inversores no desconectarán tan rápido. Puede tener un efecto similar al de las tensiones comerciales chino-estadounidenses. Y como esos miedos, van y vienen, lo que desencadena la compra y venta de dichos activos.
El nuevo año ha dado lugar a diferentes tendencias, con algunos activos cada vez más prominentes, otros perdiendo algo de brillo y algunos se han vuelto más difíciles de operar.
Aquí hay cinco activos de refugio seguro principales en 2020:
1) Oro
El oro ha regresado por varias razones. Los inversores del oro, que se sintieron consternados por la caída de los precios a mediados de la década, han comenzado a regresar al metal precioso de las viejas generaciones. Además, algunos de los que fueron seducidos por las criptomonedas se han desilusionado.
Ambos activos son atractivos para quienes temen la inflación inducida por el banco central. El oro se ha beneficiado de los recortes de tasas de interés de la Reserva Federal en 2019 y proporciona una amplia liquidez al mercado de repos.
Y mientras algunos bancos centrales están imprimiendo dinero, otros, como Rusia y China, han diversificado sus carteras en oro. Otro factor que ayuda al metal amarillo proviene de la alta demanda de otros materiales raros como el paladio y el rodio, utilizados en automóviles modernos.
En general, los precios del oro están disfrutando de una tendencia alcista que puede continuar. Todavía hay un largo camino por recorrer para alcanzar un pico cerca del nivel de 2.000$ registrado en 2011, dejando espacio considerable para subir.
El oro continúa disfrutando de una tendencia alcista:
2) Yen japonés
La moneda japonesa encabeza la lista de monedas de refugio seguro, pero el comercio del yen está abarrotado, dejando la corona al oro. Sin embargo, el USD/JPY y otros cruces del yen han caído cuando han surgido noticias deprimentes, incluso si estaban relacionadas con Japón.
El devastador terremoto, tsunami y desastre nuclear en Fukushima en 2011 resultó en un movimiento hacia el yen, a pesar de la catástrofe para la nación. Si bien su estado se ha erosionado desde entonces, la moneda se ha beneficiado de las tensiones en torno a Corea del Norte y, más recientemente, Irán. Sigue en demanda también con el coronavirus.
3) Bonos estadounidenses
El dólar estadounidense es la moneda de reserva mundial, y los bonos del Tesoro aún proporcionan un alto rendimiento en comparación con otras naciones desarrolladas. Además, el mercado de deuda de Estados Unidos es profundo y líquido, lo que permite a los inversores comprar letras, bonos y obligaciones en casi cualquier momento.
Si bien los recortes de impuestos del presidente Donald Trump han hinchado el déficit y la deuda de EE.UU., la amplia liquidez proporcionada por la Reserva Federal y la demanda insaciable de bonos lo convierten en el activo de referencia en los mercados de deuda.
Es esencial tener en cuenta que la deuda de EE.UU. es un activo digno de refugio seguro mientras que el dólar estadounidense pierde su brillo en 2020. Al igual que el yen, la demanda del USD está superpoblada. Además, cuando los inversores acuden a los bonos del Tesoro de los Estados Unidos, reducen sus rendimientos, lo que hace que el dólar sea menos atractivo. Esta correlación rendimiento-dólar no fue tan prominente en 2019, pero parece estar cobrando ritmo en 2020.
4) Franco suizo
El pequeño país en los Alpes alberga bancos secretos, seguridad y solidez. Sin embargo, la decisión del Banco Nacional Suizo de vincular el valor del franco al euro en 2011, y su abandono caótico de este suelo en 2015, lo han llevado a la baja.
Sin embargo, 2020 ha sido positivo para el CHF. Si bien no es la primera opción cuando surgen malas noticias, tampoco se vende tan rápido. En general, sirve como una alternativa atractiva al comercio del yen para aquellos que prefieren evitar el oro.
5) Bonos alemanes
¿Prestar dinero y esperar recibir menos a cambio? De hecho, eso es lo que está sucediendo en la mayor parte de la curva de rendimientos de Alemania. La locomotora del Viejo Continente está mostrando solo pequeñas señales de abrir sus carteras a la inversión fiscal.
La combinación de un grupo de bonos poco profundos y una alta demanda del Banco Central Europeo, que ha reiniciado su esquema de compra de bonos en noviembre, amplifica la necesidad de los bonos alemanes.
Además de problemas globales como el coronavirus, la UE está lidiando con el Brexit, las amenazas rusas y la división política. En este mundo cambiante, los bonos alemanes siguen siendo un paraíso. Sin embargo, los rendimientos negativos significan que hay un límite de hasta dónde puede llegar la demanda de refugio seguro.
El resultado interesante para los inversores de divisas es el efecto moderador que la demanda de bonos tiene sobre el euro. La volatilidad del EUR/USD se mantiene presionada mientras la de otros activos se dispara.
¿Qué hay del Bitcoin?
Como se mencionó anteriormente, algunos inversores del oro se convirtieron en creyentes del Bitcoin. Durante la crisis en torno a Irán, el abuelo de las criptomonedas se disparó. Sin embargo, si bien los precios permanecen por encima de los niveles de finales de 2019, el brote de coronavirus no ha logrado desencadenar una recuperación sostenible.
¿Por qué?
Las sanciones obstaculizaron a Irán, y algunos de sus ciudadanos han utilizado el Bitcoin como un medio para interactuar con el mundo exterior. El temor a una guerra abierta con Estados Unidos, y más tarde la desaparición de estas preocupaciones, impulsó la demanda tanto de los iraníes como de los especuladores del exterior.
Sin embargo, el nuevo coronavirus no está desencadenando salidas sustanciales de China, al menos no por ahora. Después de una caída inicial del yuan, se ha recuperado, en parte debido a los esfuerzos de los funcionarios para mantener estable la economía. Sin este tipo de factor de miedo, las criptomonedas no van a volar.
La segunda economía más grande del mundo es el hogar de muchos mineros de Bitcoin y aún no ha aceptado su política de moneda digital.
El Bitcoin también es complicado como un activo de refugio seguro ya que su precio está determinado por muchos otros factores, que no están relacionados con el estado de ánimo global. Hacks de intercambios, regulación, movimientos de Altcoins a BTC, tasa de hash, actividad de ballenas y muchos otros factores relacionados con las criptomonedas están todos en la mezcla.
Un aumento en el valor del Bitcoin junto con el aumento de los temores globales puede, por lo tanto, ser una coincidencia y no repetirse.
El caso del Bitcoin es más complicado:
Conclusión
El temor al coronavirus está preparado para durar un período de tiempo significativo y cuando disminuya, otros problemas probablemente preocuparán a los inversores y desencadenarán flujos monetarios hacia los activos de refugio seguro. El oro encabeza la lista de paraísos en 2020, llevando al yen al segundo lugar. Los bonos estadounidenses y alemanes están aumentando en importancia junto con el franco suizo. El estado del Bitcoin como un activo de refugio seguro todavía está en progreso.
