La ausencia de datos macro y de noticias referentes a la guerra comercial hizo del lunes un día muy tranquilo en los mercados financieros. Sobre el cierre de la sesión americana, una llamativa baja en los índices bursátiles de Nueva York le dio tono a la jornada, aunque el movimiento no fue fuerte ni largo.
Pero al margen de los eventos de la semana, las decisiones de política monetaria de la Reserva Federal, y el Banco Central Europeo, y las elecciones generales en Reino Unido, la preocupación de los mercados pasa ahora por la guerra comercial.
Y es que el 15 de diciembre, en teoría, comienzan a tomar vigencia los nuevos aranceles que el presidente Trump impuso contra las importaciones chinas. Y a falta de pocos días para esa circunstancia, son muchas las negociaciones que intentan impedir dichos aranceles, que provocarían un fuerte perjuicio a la economía de China.
Si estos diálogos frenéticos llegan a buen puerto, sería no solo un cierre de año ideal para la bolsa de valores, que experimentaría un rally importante (son muchos los que apuestan aún por la llegada del índice Dow Jones a los 30.000 puntos antes del 31 de diciembre), sino que sería el punto de partida a un acuerdo “fase uno” que empiece a cerrar la guerra comercial que enfrenta a las dos primeras potencias globales. De allí es que esta semana resulta fundamental en este sentido. Tiene que haber algún acuerdo antes del próximo sábado.
Por el momento, y yendo al mercado de divisas, el euro se mueve en torno a 1.1070, con una tendencia ligeramente alcista en el gráfico de 4 horas, aunque aún parece lejos de superar 1.1195. Si lo hace, los máximos de la semana pasada en 1.1115 será la resistencia a tener en cuenta.
En cuanto a la libra esterlina, el lunes frenó su alza en 1.3180, un nuevo máximo de más de 7 meses, para caer con mediana intensidad al actual 1.3135, y cediendo una tendencia alcista que se mantuvo intacta durante más de una semana. El gráfico de 4 horas presenta una fuerte divergencia entre momento y la curva de precios, y con el indicador de fuerza relativa saliendo de una zona de fuerte sobre compra, lo que en conjunto está avisando que la divisa británica tendrá una sesión de martes bajista. En dicho caso, 1,3095 y 1.3070 serán los soportes a considerar.
Mientras esto sucede, el yen, el dólar australiano y el dólar canadiense se presentan sin cambios. El Loonie, al menos, recuperó algunas posiciones luego de una fuerte baja que sufrió el viernes luego del dato de empleos de Canadá, que ofreció cifras muy negativas.
Y no hay mucho más por el momento. En estos días de transición, solo alguna declaración fuera de programa puede despertar a los mercados. Esta vez, por supuesto, todos esperan que Estados Unidos y China lleguen a un acuerdo, y que no se siga ampliando la guerra comercial. ¿Por qué no pensar en que este martes puede ser un buen día para que ello ocurra?
Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el miércoles.
Adrián Aquaro
Trader College