A menos de tres semanas para la materialización del Brexit todas las opciones siguen sobre la mesa. Aunque Bruselas cree que sigue habiendo importantes obstáculos para llegar a un acuerdo, ha reconocido avances y la idea de una prórroga adicional de tres meses cobraba fuerza. Calcular cuáles serían las consecuencias para las Bolsas de una ruptura sin acuerdo no es tarea sencilla, pero no sería nada descabellado que una salida o divorcio sin acuerdo provocase que la Bolsa de Reino Unido cayese un 6-8% en el menor de los casos y las Bolsas europeas también, pero menos, digamos que el Eurostoxx 50 podría llegar a caer un 5-6% como poco, siendo los sectores más lastrados el financiero y el de coches.
El sentimiento generalizado es que la Unión Europea hará todo lo posible para evitar un fiasco, de hecho el mercado todavía cree que al final se alcanzará algún tipo de acuerdo, que aunque sea también negativo, aminorará los peores efectos que se podrían esperar.
Un Brexit sin acuerdo podría tener como consecuencia en nuestro país un descenso del 0,8( del producto interior bruto en los próximos ejercicios y un coste económico en torno a los 10.000 millones de euros.
Irlanda juega un papel fundamentalmente en esta historia, tiene que dar su consentimiento en el tema de cómo evitar que se convierta «en una puerta trasera en los mercados de la UE, pero sin tener controles en la frontera con Irlanda».
Los valores de la Bolsa española con más exposición ante un Brexit duro son IAG (es la que tiene una mayor exposición al Reino Unido con más del 30% de sus ingresos), Banco Sabadell (el 15% de sus ingresos proceden de TSB, su filial en el Reino Unido), dentro del sector bancario también estaría Santander, Iberdrola (con el riesgo de posibles interrupciones en la cadena de suministro).
Mientras, la economía del Reino Unido se contrajo en verano cuando aumentaron los temores sobre el Brexit. El producto interno bruto cayó 0.1% después de un aumento de 0.4% en julio y diez de los 13 sectores manufactureros registraron caídas, lo que sugiere que la desaceleración mundial está afectando la demanda.
Nissan ha sido una de las compañías que ya ha avisado de los riesgos de un Brexit duro para el sector del motor y reconoce que las operaciones de la compañía no serán sostenibles si un Brexit sin acuerdo conduce a unos aranceles del 10%. Y es que la empresa japonesa tiene plantas en Reino Unido (Sunderland) y España (Barcelona y Ávila) y los controles aduaneros pueden interrumpir el flujo de componentes a las fábricas (5 millones de piezas al día) y claro, supone un aumento de costes significativos que harían que sus coches no fuesen competitivos en Europa.
A principios de año varias agencias publicaron sus listas de predicciones negativas para el 2019. Saxo Bank publicó diez, incluida un Brexit sin acuerdo y la recesión de Alemania. Por otro lado, de las ocho publicadas por Standard Chartered, algunas se cumplieron (la Reserva Federal reduce las tasas de interés, el Banco Central Europeo reinicia la flexibilización cuantitativa) y otras están en camino (Estados Unidos y China llegan a un acuerdo para debilitar el dólar, el Tesoro de USA intenta vender bonos a 50 años, el Reino Unido se enfrenta a un Brexit duro y la libra cae a la par con el dólar). En cambio tienen difícil cumplirse otras (Hong Kong abandona su paridad monetaria en dólares, la
OPEP se separa y el crudo Brent cae a 25 dólares por barril, Japón monetiza la deuda nacional y el yen sube a 80 por dólar).
Ismael de la Cruz
ismaeldelacruz.es