Este año, el mes de octubre ha empezado con el S&P500 cayendo los 2 primeros días más de un 2% (primer día -1,54%, segundo día -1,54%, total -2,75%). Sólo ha habido 4 años más en la historia en los que esos dos primeros días las caídas superaran el -2%. Concretamente en 2008 (-4,47%), 2009 (-3,01%), 1934 (-2,42% y 1935 (-4,23%). El resto del año fue generalmente favorable (en 1935 +20,99%, en 1934 +7,22%, en 2009 +8,77%) menos en 2008 que cerró el año con -18,94%.
Gráfico: Bespoke
Para los amantes de las estadísticas, decir que en la mayoría de las ocasiones, el cuarto trimestre suele ser un periodo favorable para las Bolsas, como pueden apreciar en el gráfico.
Gráfico: Robeco
Sigamos con los números y la historia. Aquí pueden ver el rendimiento medio de los sectores en Wall Street durante las recesiones (1945-2018).
Gráfico: Bespoke
Y ahora el rendimiento del S&P500 durante las recesiones (1945-2018).
Gráfico: Bespoke
Ha habido de todos los colores, cal y arena, situación generalmente compleja para los inversores porque han de calibrar a qué le dan más peso o importancia.
Para empezar tenemos la parte negativa, la OMC habilitó a Trump para implementar aranceles por una cuantía de 7.500 millones de dólares a las importaciones procedentes de la Unión Europea para compensar las ayudas concedidas a Airbus. Entre los países más afectados tendríamos a España, Reino Unido, Alemania y Francia, con aranceles del 25% sobre una serie de productos (vino, aceite, queso, etc).
La parte positiva viene también de Trump al anunciar que la próxima semana llegará a Estados Unidos una delegación de China para continuar con las conversaciones sobre la guerra comercial, un hecho que sin duda alguna supone un alivio para los mercados.
En Europa se ha exagerado un poco con las últimas referencias macro. Es cierto que se ha producido una caída de la actividad económica (mayor de lo esperado) en una serie de países con un peso importante en la UE, tales como por ejemplo Alemania, Francia y España, pero hay que tener en cuenta que el sector servicios sigue a flote y precisamente gracias a ello el PMI compuesto de la región aguanta el tipo (a excepción de Alemania).
Así las cosas, es lógico que los inversores miren a los Bancos Centrales esperando que una vez más echen un capote. En el siguiente gráfico pueden ver la política monetaria de las diversas entidades.
Pese a todo, el riesgo de recesión en Estados Unidos ha aumentado, de hecho la probabilidad de recesión en los próximos 12 meses ha subido al 40%, pero si atendemos a la curva de rendimiento la probabilidad ya asciende al 60%.
Gráfico: JP Morgan
Ismael de la Cruz
ismaeldelacruz.es