El dólar presenta un comportamiento mixto ante los activos principales desde varias sesiones atrás, y es probable que así se mantenga durante las próximas horas.
Una combinación de factores ha debilitado a la moneda líder ante el euro, que sigue por encima de 1.1000 con comodidad, a la espera de la crucial reunión de política monetaria del Banco Central Europeo, prevista para el jueves. Si todo sale como está previsto, la divisa única sufrirá una severa caída al cabo de la reunión, de la que se espera se conozcan varias medidas, entre ellas un paquete de estímulo a la economía de la Eurozona, y un probable recorte de tipos de interés.
También la libra Esterlina se ve fortalecida, y en su caso esta señal podría ser algo más sustentable. La probabilidad de que el Brexit finalmente sea negociado con la Unión Europea, más allá de la resistencia del primer ministro Boris Johnson, que desea retirar a Reino Unido al costo que sea, pintó de optimismo a los operadores, que premiaron a la divisa británica en los últimos días. De todas formas, lejos queda aún la zona de 1.2500, cuyo quiebre podría darle un impulso alcista de mayor plazo.
Por su parte, se mantienen fuertes el dólar australiano y, en menor medida, el dólar canadiense. En el caso del Aussie, un mejor clima de negocios entre Estados Unidos y China le dio fuerza desde mediados de la semana pasada, y pese a algunas correcciones puntuales, podría seguir un camino alcista de corto plazo. China es el principal mercado de exportación de Australia y Nueva Zelanda, y sus monedas se ven favorecidas ante una mínima muestra de que las dos principales potencias pueden llegar a un acuerdo para intentar al menos mitigar la guerra comercial que sostienen.
La contrapartida aparece de la mano de los activos de refugio. El yen cae moderadamente, y en verdad a baja velocidad, pero apuntando a la zona de 108.50, cuyo quiebre deberá tener lugar para una caída más sustentable. El par USD/JPY mira aún desde muy abajo el gap que dejó a inicio de mayo en 110.08, en ocasión de un anuncio de sanciones de parte del gobierno de Donald Trump contra China, que en su hora provocó una caída del euro, la libra Esterlina y el franco suizo, y un alza, que varios meses más tarde aún se mantiene en parte, del yen.
También el oro se muestra débil. Un alza que lució exagerada en las últimas semanas antecedió a una baja de igual tenor, y que aún este miércoles se mantiene. Es verdad que la caída del metal precioso se ha desacelerado durante la tarde del martes y en las primeras horas del miércoles, aunque deberá luchar en gran forma para superar los 1510 dólares que debe quebrar para retomar una tendencia alcista de corto plazo.
La agenda de noticias incluye este miércoles el primero de los datos fuertes que tendrá esta semana: el índice de inflación mayorista. Esta medición, que por un lado mide el índice de precios de la producción, se realiza tanto en términos generales como también excluyendo los alimentos y la energía. Habitualmente, los pronósticos publicados no coinciden con las cifras publicadas, por lo que siempre es recomendable esperar el dato para luego tomar acción en el mercado.
Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el jueves.
Adrián Aquaro
Trader College