Un nuevo orden aparece en el sector de las operadoras. De cara a agosto Orange sigue con fútbol, mientras que Telefónica buscar ofertas temporales para fidelizar clientes. Por su parte Voldafone se aferra al 5G y las tarifas de datos ilimitadas, al tiempo que MásMóvil apuesta por paquetes baratos con Internet y datos móviles. Los movimientos no han hecho más que comenzar.
Un hecho significativo es que varios altos cargos y consejeros de la compañía han invertido más de un millón de euros en acciones aprovechando la caída que tuvo del 18%. Concretamente, el viernes 9 de agosto, el vicepresidente segundo, Josep María Echarri, compró 5.300 acciones a un precio medio de 18,80 euros.
Las acciones de MásMóvil se dispararon ayer lunes 6,45%, básicamente por el informe de Bank of America Merrill Lynch que apostaba por comprar acciones (ya sabemos cómo funciona ésto, cuando alguien “fuerte” emite una recomendación de compra o de venta suele producirse movimiento y reacción).
¿Y por qué las acciones cayeron como lo hicieron durante el verano? Entre otras razones, se debió a la competencia en el mercado de bajo coste y las preocupaciones por una posible mayor competencia de Euskaltel.
En principio, el precio objetivo se encuentra en torno a los 25 euros, pero personalmente me fijaría primero en los 21,50 euros y mientras su cotización no logre romper esa barrera no miraría más arriba (llegado ese caso la meta estaría en los 23-23,50 euros).
La última vez que les hablé de MásMóvil fue el pasado 25 de junio y les comenté que, “técnicamente hablando, en agosto de 2018 formó un soporte interesante en los 17,40 euros. El precio no regresó a esta zona hasta marzo-abril de este año, actuando muy bien el soporte, puesto que fue justo tocarlo y comenzar a subir con fuerza, de momento a los 21,25 euros. Así pues, si el precio regresase a 17,40 euros sería una nueva oportunidad para buscar un rebote al alza”.
Pues bien, llegó el 14 de agosto y tras un pequeño susto está rebotando al alza, de momento superando los 18 euros.
El planteamiento es que podríamos estar ante un punto de inflexión que, poco a poco, nos lleve a ver los 21,50 euros como primer objetivo.
A su favor cuenta con varios elementos:
– Sus ingresos han avanzado a doble dígito en los últimos tres años y no ha dejado de captar clientes de otros competidores. Se espera que la facturación en el actual ejercicio llegue a los 1.700 millones de euros, subiendo a 1.900 millones el próximo año.
– Cuenta con red propia de telefonía fija, móvil y banda ancha, aunque también alcanza acuerdos con sus rivales para aumentar su cobertura.
– Presenta un consumo de caja elevado y un leve desapalancamiento.
Ismael de la Cruz
ismaeldelacruz.es