La reunión entre los lideres de Estados Unidos y China, Donald Trump y Xi Xinping, dejó como saldo un mensaje de relativo optimismo para los mercados. Tal como se esperaba, ambos líderes acordaron una tregua en la guerra comercial que enfrente a ambos países, dejando sin efecto nuevos aranceles a las importaciones, con lo que Trump venía amenazando desde hace tiempo, aunque manteniendo la estructura de aranceles actual.
Lo más importante, de todas formas, fue el levantamiento de sanciones contra la firma Huawei, que desde hace aproximadamente dos meses no podía negociar con empresas estadounidenses de tecnología, lo que había generado una baja muy sensible en sus ventas. Esta novedad fue bien tomada por los mercados.
Y los movimientos en los precios estuvieron en línea con lo esperado. Una fuerte baja de la onza de oro, que ya cedió 60 dólares de los 100 que había ganado en pocos días, pone de manifiesto que los inversores salieron a buscar riesgo nuevamente, con alzas en las bolsas asiáticas y con los futuros de los índices de Nueva York ya rozando nuevamente máximos históricos. El yen, a su vez, también cae moderadamente, superando la cota de 108.00 unidades, aunque dejando un gap que no cubrió en 107.92, cierre del viernes.
Las monedas europeas también cedieron posiciones, ante el fortalecimiento del dólar. El euro llegó a 1.1315, para recuperarse en estas horas, pero sin superar la zona de 1.1380 aún, que necesita quebrar para buscar los máximos de la semana pasada, en 1.1410. La libra Esterlina, por su parte, cae fuerte en estos momentos, mientras se acerca el momento de la definición del Brexit, que todo apunta será duro y sin acuerdo con la Unión Europea.
El contexto favorece al dólar para las próximas horas, aunque siendo el primer día del mes, y lunes, es probable que los movimientos sean medidos y estrechos. La publicación del PMI de manufacturas es lo más importante del día, y puede ser clave para la sesión americana. La medición ha sufrido bajas en los últimos meses, acercándose a los peligrosos 50 puntos, que marcan la división entre expansión y contracción del sector.
La semana, de todas formas, tendrá sus principales atractivos en el ISM de servicios, que se conocerá el miércoles, y el dato de empleos de junio, que se dará a conocer el viernes. En ambos casos, el dólar estará bajo presión, sobre todo el viernes, dado que la variable del trabajo, aún cuando permanece muy sólida, ha dado signos débiles en mayo.
Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el martes.
Adrián Aquaro
Trader College