La compañia inició en 2012 una estructura alcista desde los 10 euros. Las fuertes resistencias se encuentran en los 38 euros por acción.
Por Guillermo Torrego (XTB)
ACS, la constructora española que preside Florentino Pérez ha logrado adjudicarse el contrato de la nueva estación londinense de Euston del AVE británico por un valor de 2.000 millones de euros. Esta noticia dará solidez al crecimiento de los beneficios netos estimados del 14% para 2019. La compañía se enfrentará el siguiente mes a fechas clave para el depardero de las bolsas, el 1 de marzo finaliza la tregua comercial y el 29 está previsto la formalización del Brexit.
Los títulos de ACS vienen mostrando un buen comportamiento, la compañía inició en 2012 una estructura alcista desde los 10 euros hasta los máximos ligeramente por encima de los 38 euros por acción registrados en agosto de 2018, en esta zona se encuentran las fuertes resistencias de 2009. A partir de ahí, los riesgos macroeconómicos ya conocidos tuvieron su efecto en la cotización realizando un movimiento correctivo hasta los 31 euros que coincide con el primer nivel de relevancia del retroceso de Fibonacci en el 23.6.
A nivel técnico, la cotización de ACS acaba de marcar una señal de compra con el corte de la media móvil de 20 sesiones (línea gris). La cotización de la entidad se frenó hasta en tres apoyos en la tendencia alcista y ahora parece dirigirse nuevamente a la zona de máximos de los 38,7 y superarlos. Todos estos factores nos hacen pensar en una estrategia alcista buscando un rebote como primer objetivo de los 40 euros, siendo este nivel la siguiente resistencia con la que se enfrentará el valor.
Las acciones de ACS están muy pendientes al fin de la tregua comercial. De producirse el peor escenario EE.UU elevaría los aranceles del 10% al 25%, sobre un total de 200.000 millones de dólares sobre las exportaciones chinas, que provocaría mayor incertidumbre a los mercados de renta variable. En este sentido, los títulos podrían retroceder de nuevo hasta el mínimo de los 31,5 euros, de perder esa cota intentaremos colocar un stop loss ceñido justo por debajo del soporte para minimizar el riesgo pensando que la cotización podría retroceder hasta el nivel siguiente del retroceso de Fibonacci del 38.2.