La volatilidad llevaba muchos años dormida, ajena e insensible a los movimientos geopolíticos, a la finalización de las QE. Como si nada pasara. Un león dormido. Cuando te acercas a él, lo normal es que te mate de un zarpazo. Es el rugido de la volatilidad. Ya saben que la volatilidad es la variabilidad de la rentabilidad de una acción respecto a su media en un periodo de tiempo determinado. Cuando esa volatilidad se compara con la volatilidad del mercado se le denomina beta (β). La renta variable no tiene vencimiento. Se puede comprar y vender todos los días y su rendimiento no es conocido de antemano. El gran riesgo, entonces, de la inversión en renta variable es el “riesgo de precio”, el resto de riesgos están incluidos en él. O dicho de otra manera no sabemos a qué precio están dispuestos a comprar lo que nosotros queremos vender. Cuando la volatilidad se desmadra, sale del curso o media histórica, llegan los zarpazaos. Muchos de ellos, mortales. Dos graficos muy interesantes y FELIZ 2019.
La volatilidad hizo una gran remontada en 2018: estos fueron los 5 días más locos del mercado de valores este año:
https://markets.businessinsider.com/news/stocks/stock-market-news-5-craziest-days-in-2018-2018-12-1027836533
Y esta fue la gran loca semana de Navidad para el mercado de valores, en un gran gráfico
Moisés Romero
La Carta de la Bolsa