Los mercados terminaban en verde la semana gracias a las últimas noticias que llegaban de la negociación entre USA y China en lo referente a un acuerdo comercial, la superación de la moción de confianza por parte de Theresa May en el tema del Brexit y la intención del Gobierno de Italia de reducir el déficit .
Pero poco cambia el escenario en el que nos encontramos. La economía de China sigue mostrando signos de desaceleración económica (las ventas minoristas crecían a su ritmo más bajo desde el año 2003 y la producción industrial era la más baja en tres años), la curva de rendimiento de USA sigue invertida, nadie puede asegurar la paz comercial entre Estados Unidos y China, el Brexit sigue encallado, la zona euros continúa debilitándose (el PMI Manufacturero retrocedía cuatro décimas y el PMI servicios recortaba dos puntos, sin olvidar que el BCE revisaba a la baja el PIB).
La pregunta en la Encuesta de Sentimiento a los miembros de AAII era si esperan que la economía de los Estados Unidos «caiga» en los próximos 6-12 meses. Las respuestas fueron variadas. El grupo más grande (25%) espera que la economía siga creciendo, pero a un ritmo más lento que este año. Casi el 13% espera que el crecimiento se mantenga a buen ritmo. Alrededor del 14% espera que el crecimiento económico sea plano. Un poco menos del 13% piensa que la economía se desacelerará o incluso entrará en recesión. Algunos dicen que su perspectiva depende de lo que suceda con la guerra comercial (7%) o de lo que haga la Reserva Federal con las tasas de interés (3%).
Respecto al sentimiento de los inversores sobre los mercados, los resultados fueron los siguientes:
- – El sentimiento alcista (expectativas de que los precios de las acciones subirán en los próximos seis meses), cayó 17 puntos porcentuales a 20.9%. El optimismo fue el más bajo desde el 25 de mayo de 2016 (17.8%). La caída mantiene el optimismo por debajo de su promedio histórico del 38,5% por doceava semana en 14 semanas.
- – El sentimiento neutral (expectativas de que los precios de las acciones se mantendrán esencialmente sin cambios durante los próximos seis meses) retrocedió 1.3 puntos porcentuales a 30.2%. El sentimiento neutral está por debajo de su promedio histórico de 31% por sexta vez en siete semanas.
- – El sentimiento bajista (expectativas de que los precios de las acciones caerán en los próximos seis meses) aumentó en 18.4 puntos porcentuales a 48.9%. Este es el nivel más alto de pesimismo registrado por la encuesta desde el 11 de abril de 2013 (54.5%). El gran aumento mantiene el sentimiento bajista por encima de su promedio histórico del 30,5% por décima semana consecutiva. El salto del pesimismo de esta semana también es el mayor incremento semanal desde abril de 2013.
En la Bolsa norteamericana, las tensiones relacionadas con el comercio entre Estados Unidos y China, la debilidad en el sector de la tecnología, las preocupaciones sobre la desaceleración del crecimiento global y el nerviosismo por la marcha de la Reserva Federal hacia tasas de interés más altas han mantenido a los inversores en estado de alerta. El índice de volatilidad VIX ha registrado un cierre diario (promedio) de 15,8 en lo que va de año, frente a 11,2 del año pasado (recordemos que niveles por encima de 20 implica nerviosismo entre los inversores).
La curva de futuros del VIX, que muestra los precios de los contratos con diferentes fechas de vencimiento, es muy plana, lo que indica que los operadores esperan que se mantenga alrededor de los niveles actuales.
Fuente: Reuters
Las acciones de las empresas de pequeña capitalización han confirmado que están en su primer mercado bajista en tres años (cayeron por última vez en un mercado bajista entre junio de 2015 y febrero de 2016, cuando recortaron un 20,7%. Antes de eso, sufrieron una caída del 27% entre julio y octubre de 2011).
El viernes, el índice S&P 600 de acciones de pequeña capitalización cayó un 1,6% para marcar una caída del 20,05% desde su máximo del 31 de agosto. Las acciones de pequeña capitalización suelen sortear mejor las caídas debido a que obtienen más ingresos de su país que las compañías de gran capitalización. Inicialmente se las considera un refugio y la fortaleza del dólar, que hace que los productos de los grandes exportadores estadounidenses sean más caros para los clientes extranjeros, también proporcionó un impulso relativo a los títulos de pequeña capitalización. Pero en esta ocasión han sufrido la mayor parte de las ventas en la última caída del mercado debido a su mayor sensibilidad al aumento de las tasas de interés.
Ismael de la Cruz
ismaeldelacruz.es
Fuente: Expansion.com