Para cotizar en el Ibex 35, el Comité Asesor Técnico (CAT) exige una serie de requisitos a las compañías:
- – La capitalización ha de ser equivalente al 0,30% del valor medio del Ibex durante el periodo de control (los seis meses de una reunión a otra).
- – La liquidez de la compañía.
- – El número de acciones en circulación. Cuanto mayor capital de la compañía cotice en el mercado, mejor.
Pues bien, el CAT decidió ayer lunes excluir a DIA del Ibex 35 y en su lugar meter a Ence, una sustitución que tendrá efecto desde el 24 de diciembre. Y es que DIA abandona el selectivo español por la fuerte pérdida de capitalización este año (se sitúa en 317 millones de euros), hecho que se vio agravado con el profit warning y la suspensión de dividendos (su cotización cae en el ejercicio un 87%). Por si fuera poco, el escenario continúa delicado, ya que las posiciones bajistas en la compañía representan casi el 15% de su capital, aun así lejos del 21,50% del pasado mes de agosto. Por su parte, Ence cuenta con una capitalización de 1.300 millones de euros, ocupando el último lugar en este concepto en el Ibex junto a Técnicas Reunidas (en el año cae un ligero 0,05%).
El productor de celulosa y energías renovables registró en los nueve primeros meses del año un ebitda de 213,6 millones de euros (un 45% más), y un beneficio de 91 millones (un 54% más que en el mismo periodo del año pasado).
Ence ha sido uno de los valores estrella estos años. Desde que terminó 2014, su valor de mercado se ha multiplicado por tres desde los 500 hasta los 1.500 millones de euros. Pero desde los máximos históricos de octubre está sufriendo los recortes en Bolsa.
Santander es de los más optimistas dándole un precio objetivo en 9,30 euros, mientras que el consenso del mercado es más cauto y lo sitúa en los 8 euros.
Técnicamente hablando, presenta un nivel de soporte en los 4,78 euros que se formó el pasado mes de febrero. Un soporte es el nivel del precio donde el interés de los compradores es superior al interés de los vendedores, con lo que se impone la presión compradora, resultando en una subida del precio cuando alcanza dicho nivel. Por tanto, en un soporte se tiende a comprar esperando el rebote al alza.
Se estima que un soporte es sólido y fiable si se cumple al menos uno los dos siguientes requisitos:
- * Número de veces puesto a prueba: cuanto mayor sea el tiempo que actúa el precio en el soporte, más fuerte es. Es decir, si se ha formado un soporte y desde su formación ha sido puesto a prueba, por ejemplo, en cuatro ocasiones durante tres meses, todas ellas con éxito, refuerza el soporte.
- * Volumen: cuanto mayor volumen se haya negociado en el nivel de soporte, más fuerte será.
Ismael de la Cruz
ismaeldelacruz.es
Fuente: Investing.com