«Hay leyes irrefutables en el comportamiento secular de las Bolsas. Una de ellas, quizá la más poderosa, es la del Sentimiento Contrario. Lo estamos viendo, gozando y sufriendo (depende si vas o no con el pie cambiado) en los últimos siete años. Recuerden que a principio del ejercicio todos los informes de estrategia situaba a la Bolsa en el primer puesto de la lista de recomendaciones. El fiasco, por ahora y como el año pasado, es mayúsculo con el Ibex rozando tasas de rendimiento negativas. Pero todo puede cambiar. Quizá hoy no ni mañana. Quizá tampoco en semanas inmediatas. Es cuestión de estar con la caña echada. Es la hora del sentimiento contrario. Cuando uno se aferra a esta Ley, a la el Sentimiento Contrario, debe medir muy bien el tiempo, los pasos, la coyuntura, el ciclo. En los informes que llegan a mis manos, proyectados para 2016, hay ¡por fin! pesimismo en la aldea de los analistas, cuando hasta ahora todo era subir y subir. Es una buena noticia: todos están a la baja…»
«Compilamos datos y escritos: 1.-Todo sigue igual o peor que hace seis años, cuando empezó a dibujarse la tendencia bajista genera
2-.Nadie parece estar dispuesto a poner los euros sobre la mesa de la Bolsa.
3-.Las ideas se han congelado. A la espera.
4-.Sin ideas que admirar no hay sentimientos enfrentados, que son los que influyen de manera decisiva en el proceso de formación de los precios. A unos les gustan las nuevas ideas y compran, otros las desprecian y venden. Gracias a ello, las cotizaciones suben y bajan. Así se mueve la Bolsa.
5-.Las nuevas ideas en la Bolsa van relacionadas, generalmente, con el seguimiento de las modas impuestas por los grandes actores en el mercado, es decir, por los fondos apalancados, la banca de inversión y las instituciones que mayores masas de dinero mueven cada día. Hay ideas perversas, como las que sucedieron a la crisis de los valores tecnológicos en marzo de 2000. Fue el ciclo de los escándalos contables y financieros.
6-.Hay en la actualidad Grandes Ideas, como la de Economía Digital, pero le siguen poniendo trabas, palos en la rueda. Una Idea que prosperará, pero antes Gobiernos, empresas, familias y e individuos deben entenderla.
7.-El mundo, así, no acaba de arrancar. Los episodios de bajo crecimiento y las recaídas en recesión (Japón) se suceden
8.-Las valoraciones bursátiles son excesivas, porque están infladas por los bancos centrales
9-.El alza de los tipos de interés en USA provocará fuertes desplomes en los mercados de acciones
10-.Los commodities seguirán a la baja y arrastrarán, aún más, a los emergentes
11-.La política es un factor de incertidumbre añadido en medio mundo (o más, no sólo en España)
12-.No cabe esperar rendimientos positivos en las Bolsas.
13-…..y más y peores presagios
«La pregunta es ¿y ahora qué? ¿Cuándo volverán los que han vendido a tomar posiciones de nuevos en los mercados, que son, claro, los que exponen este sortilegio de catástrofe? ¿Qué señales necesitan? Y cuándo lo hagan ¿Cómo reaccionarán los índices? Recuerde que nada ha cambiado de manera sustancial en los últimos meses. Todo sigue en mano de los bancos centrales ¿O alguien se creía en enero que en este año las Economías Globales iban a crecer con fuerza?…»
«En la recta final del año, las Bolsas están preñadas del pesimismo general de los gestores. Muchos dicen que ESTO NO TIENE ARREGLO, atenazados, entre otros asuntos, por las raquíticas cifras de crecimiento en el mundo. Los índices de las Bolsas han tomado buena del asunto, han defraudado y los gestores se sienten incómodos en los niveles actuales. La pregunta que se hacen los analistas más fríos es si gran parte de la Gran Caída se ha producido ya o, si por el contrario y como algunos pregonan, los más bajistas, aún caben recortes adicionales en los próximos meses…»
«Pero ya sabe: cuando algo te obsesione, cuando algo llegue a tal extremo sólo hay que pensar en los contrario, por que ahí está la respuesta». Obsesionados por el pasado de la Bolsa, obsesionados por el devenir. Desquiciados, que es cuando los sentimientos llegan a un extremo ¿Por qué no considerar que lo correcto es apostar por lo contrario hasta mantener una postura serena, reflexiva, lejos de la compulsión? Hay lecciones magistrales escritas en el gran Libro de la Historia de la Bolsa, que permanecen vivas con el paso del tiempo. Una de ellas recala en el sentimiento contrario (otros la definen como sensu contrario), de los actores. Cuando la mayor parte de ellos se coloca en el mismo plato de la balanza, el fiel de la misma, el índice, hace justamente lo contrario para sorpresa general y regocijo de los más atrevidos. Cuando la mayoría apuesta con ganas y con mucho descaro por una caída de la Bolsa, el mercado suele subir. Y al revés. Lección magistral que hemos aprendido en muchos ciclos bursátiles ¿Va a ser éste diferente?…»
(De la conversación mantenida con uno de mis gurús favoritos)
Moisés Romero
Fuente: La Carta de la Bolsa