Las Bolsas europeas mantienen la tónica alcista en su tendencia primaria. La expectativa del incremento del QE anima a los inversores, aunque sin ello la historia sería diferente.
España se mantiene como uno de los países que más crece dentro de la zona euro, concretamente un 0,8% entre los meses de julio y septiembre, lo que supone más del doble que Alemania que crece un 0,3%, que Italia con un 0,2% o que Francia con un 0,3%, sin olvidar que el PIB de la eurozona avanza un 0,3%.
El PMI manufacturero de la eurozona asciende a 52,8 cuando se esperaba 52,3, al igual que el PMI servicios que sale en 54,6 frente al esperado 54,1.
PMI servicios 54,6 vs 54,1 consenso. Los nuevos pedidos y la actividad comercial suben sólidamente y el empleo marca el mayor crecimiento mensual de los últimos cinco años.
Mientras, la UE continúa avisando de que sin reformas estructurales por parte de sus países miembros poco más que podrá hacer, por mucho que siga interviniendo el Banco Central Europeo con medidas de estímulo que terminarían cayendo en saco roto, por ejemplo ampliar el programa de compra de deuda.
A favor de Europa juega el bajo precio del petróleo, en contra la ralentización de la economía de China y de otros mercados emergentes, que seguramente está ya teniendo un impacto y repercusión en la demanda exterior de las empresas del Viejo Continente.
¿Y el plan Juncker de inversiones? Pues este plan estrella sobre el que había muchas esperanzas e ilusiones para terminar de afianzar la recuperación económica ahí sigue, esperando a saber para cuándo su puesta en marcha.
Pero volvamos al tema del QE y su ampliación. Como bien explicó Bloomberg la pasada semana, el BCE no tendrá suficientes bonos alemanes disponibles para comprar en el mercado, puesto que la entidad debería adquirir en torno a 228.300 millones de euros en deuda germana y Alemania cuenta con 682.000 millones, de los cuales el BCE sólo puede adquirir un 33%, según sus propias normas, un porcentaje que deja el total disponible en 225.210 millones, 3.110 millones por debajo de lo que se ha comprometido a comprar (y con Eslovaquia pasa lo mismo, aunque el desfase es menor).
El BCE comentó recientemente que están planteándose recortar la facilidad de depósito en diciembre. Esta medida es cierto que permitiría comprar más deuda alemana (recordemos que la entidad no compra títulos con rentabilidades por debajo del tipo de depósito y la alemana presenta rentabilidades inferiores), puesto que recortar la facilidad de depósito amplía los bonos que puede comprar la entidad.
El futuro Eurostoxx, el mercado más importante en Europa, mantiene intacta la tendencia principal y todo indica que en líneas generales debiera de seguir así al menos hasta diciembre cuando veremos si actúa el BCE y la FED, en el primer caso el día 6 y en el segundo caso los días 15 y 16.
En el corto plazo presenta fortaleza mientras continúe por encima de los 3.290 puntos.
El soporte de 2985-2998 y el de los 2850 puntos se mantienen vigentes, de manera que el día que regrese a estos niveles podría rebotar al alza, al menos la primera vez.
Tiene la primera zona de resistencia en el doble pivote de los 3700-3753 puntos, zona que el día que llegue el precio seguramente no podrá romperla en los primeros intentos.
Ismael de la Cruz
ismaeldelacruz.es