Si bien la crisis financiera de Turquía ha ingresado en una suerte de pausa, la misma está lejos de terminar, y el desenlace no se ve claro ni a corto plazo.
La nueva caída de la lira, que el lunes llegó a un mínimo histórico de 7.1000 ante el dólar, fue revertida parcialmente con los anuncios del gobierno turco de colocar unos 6000 millones de dólares en el mercado. Este martes, mientras promedia la sesión europea, se ve una gran volatilidad en el par USD/TRY, que pasó de 6.9400 a 6.3700 en pocas horas, para situarse en 6.5800 en estos precisos momentos. A la luz de lo que viene ocurriendo, varias casas bróker han elevado sus exigencias de margen en los pares de la lira, lo cual la hace prácticamente inoperable para cortos plazos, al tiempo que resulta sumamente no aconsejable hacerlo.
Los pares del dólar, en este contexto, se están tomando un respiro, a la espera no solo de novedades provenientes de Turquía, sino también de cifras macro que ya comienzan a conocerse en varios países centrales.
Paradójicamente, el euro parece haber reaccionado en contra de datos de Alemania que mostraron cifras mejores que las esperadas. El PBI local, como también el de Francia, han crecido en buena forma en el segundo trimestre, y si bien el cruce EUR/USD llegó a 1.1428 apenas conocidos los datos, no pudo mantenerse en tal nivel, y volvió a caer de la cota d 1.1400. La tendencia en el gráfico de 4 horas no presenta una tendencia clara, aunque el quiebre de 1.1365, mínimo del lunes y desde julio de 2017, podría estirar las pérdidas del euro a las próximas horas, con soportes en 1.1330 y 1.1310. Para ofrecer una recuperación sustentable, la moneda única deberá quebrar 1.1430, máximo del día.
La libra Esterlina, en tanto, perdió posiciones luego de conocidos los datos de empleo en Reino Unido. Si bien el par GBP/USD mostró un alza importante, quebrando una línea de tendencia bajista medida en el gráfico de 4 horas, dicho quiebre no pudo confirmare, y la libra vuelve a perder el soporte de 1.2800. De todas formas, el precio se ubica lejos de 1.2720, mínimo del año, que tocó el viernes pasado, y solo su quiebre podría extender la caída de la moneda británica a las próximas horas.
Por su parte, el yen cae ligeramente ante el dólar, aún cuando se mueve en un rango estrecho de precios. Una cierta relajación en el ánimo de los mercados actuó en contra del yen, que ahora cotiza por debajo de 111.00, aunque sin una tendencia clara para el resto del día. La onza de oro, que suele comportarse en la misma dirección que el yen, también sigue un camino bajista muy marcado, y ya perdió la zona de 1200 dólares; sin embargo, el metal precioso luce sobre vendido en el corto plazo, lo que hace inminente una corrección alcista.
La ausencia de datos importante en horario americano hará que la atención vuelva a centrarse en lo que sucede en Turquía, y en la llamada guerra comercial entre Estados Unidos y prácticamente el resto del mundo; las oportunidades se ven más claras en las monedas vinculadas a las materias primas, en especial al dólar australiano. El Aussie aparece con un fuerte nivel de sobre venta, y al igual que su referente, la onza de oro ya mencionada, podría experimentar una recuperación modesta en estas horas.
Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el mércoles.
Adrián Aquaro
Trader College