Mañana 6 de julio, entrarán en vigor los aranceles del presidente Donald Trump sobre bienes chinos por valor de 34 mil millones de dólares. Y es probable que con la aprobación de otros 16 mil millones de aranceles muy pronto, y China amenazando con represalias, comenzará la tan temida guerra comercial. Estos son los cuatro escenarios a los que creemos se enfrenta el mercado:
- – Escenario 1: $ 50 mil millones de aranceles y se ha acabado la historia. Los Estados Unidos imponen aranceles, China toma represalias. Los mercados financieros tiemblan. Temeroso del pánico, ambos lados envían mensajes tranquilizadores y no aplican más medidas. En este escenario, habría un impacto insignificante en la economía de EE.UU. y un lastre máximo en el crecimiento de China de solo el 0,2% el próximo año. Una ampliación de los aranceles que afecten a 250 mil millones de dólares de las exportaciones chinas podría retrasar el crecimiento económico de China hasta en un 0,5%.
- – Escenario 2: $ 50 mil millones, más una depresión en los mercados financieros. Los Estados Unidos imponen aranceles, China toma represalias, los precios de las acciones caen bruscamente, creando un efecto de segunda ronda de caída de la riqueza y condiciones de financiamiento más estrictas. Temiendo lo peor, ambas partes dejan de aplicar aranceles. En este escenario, el crecimiento en los EE.UU. se debilita en 0.4 puntos porcentuales el próximo año, China sale prácticamente indemne por la caída en acciones, gracias al aislamiento de los mercados globales, pero el arrastre de 0.2 puntos porcentuales de los aranceles se mantiene. Y la economía mundial experimenta un lastre de aproximadamente un 0,2% para el crecimiento.
- – Escenario 3: Estados Unidos impone aranceles del 10% sobre todas las importaciones y el resto del mundo toma represalias. En otras palabras, nos encontramos en una guerra comercial global. Tomaría tiempo para que se sintieran los mayores impactos, pero en 2020 el lastre del crecimiento anual del PIB podría ser del 0.4% para EE.UU., y un 0.2% para China y 0.2% para el mundo.
- – Escenario 4: Estados Unidos impone aranceles del 10% sobre todas las importaciones, el resto del mundo toma represalias y los mercados financieros se desploman. La reducción de las condiciones financieras podría elevar el impacto máximo del crecimiento del PIB al 0,8% en EE.UU. y un 0,4% en el mundo. China, al estar aislada de los shocks de las acciones mundiales, podría escapar a la carga adicional de condiciones financieras más restrictivas.
Para ser justos, una guerra comercial podría desarrollarse de muchas maneras que no se capturan en estos escenarios. Los aranceles podrían establecerse a diferentes niveles, en diferentes productos y en diferentes países. La reacción de los mercados financieros también es imposible de predecir. Los inversores de EE.UU. podrían seguir centrándose en los beneficios de los recortes de impuestos en lugar de los costes de los aranceles. El «equipo nacional» de China podría poner un suelo bajo el Índice Compuesto de Shanghai. Otros instrumentos de política pueden proporcionar una influencia de compensación. China puede optar por reiniciar los gastos de infraestructura para compensar el lastre de las exportaciones más débiles, por ejemplo.
Y, como señala el economista Jefe de Bloomberg en Asia, Tom Orlik, también existe la posibilidad de que Estados Unidos y China se retiren desde el borde del precipicio. Trump amenazó con borrar a Corea del Norte del mapa, pero terminó sentándose en una cumbre con su líder. El muro a lo largo de la frontera con México no ha sido construido, mucho menos pagado por México. Si vemos que los mercados de EE UU. se adelantan a la fecha límite del 6 de julio, o si hay más negocios haciendo cola para criticar los aranceles inminentes, las posibilidades de que la Casa Blanca busque algún tipo de compromiso para salvar la cara subirían.
En este punto, sin embargo, ese no es el escenario base.
Parece muy probable que se apliquen al menos una ronda de aranceles. Si China toma represalias – y seguramente lo hará – y los mercados financieros no proporcionan una clara señal de «stop», podría haber una segunda ronda.
En otras palabras, la única forma de que esto se detenga es que los mercados colapsen… y si los mercados no se estrellan, anticipando la marcha atrás de Trump, entonces redoblarán su apuesta sobre los ataques arancelarios comerciales hasta que lo haga.
Fuentes: BBG, Zerohedge
Carlos Montero
La Carta de la Bolsa