Con tantas fuerzas azotando los mercados, no se puede culpar a los inversores por pasar por alto un gran obstáculo que los está mirando directamente a la cara. Ya se trate de temores de una guerra comercial global o de tensiones geopolíticas crecientes, los titulares recientes se han llenado de obstáculos que parecen potencialmente catastróficos, al menos en la superficie. Viktor Shvets, jefe de estrategia global de acciones de Macquarie, argumenta que los inversores deberían enfocarse en una situación que está empeorando que está en segundo plano.
«El «hombre del saco» es un potencial drenaje de liquidez en el momento en el que los inversores ya están en el ‘lado equivocado’ de China y la zona euro, con la posibilidad de una reversión de impulso reflacionista más fuerte que la actual», dijo Shvets, en una nota a los clientes.
Si estas preocupaciones le suenan familiares, es porque el llamado drenaje de liquidez citado por Shvets era una gran preocupación para los inversores antes de que se avecinara el fantasma de una guerra comercial. Él lo ve como un subproducto del proceso de ajuste monetario de la Reserva Federal, que ya ha comenzado y continuará fervoroso. Según Shvets, la Fed no está vigilando la liquidez y parece encaminada a cometer un error de política monetaria.
Pero eso no es todo. Shvets también está perturbado porque Estados Unidos aparentemente está en el «lado equivocado» de China y la zona del euro. No, él no se está refiriendo a la guerra comercial, él quiere decir que el impulso de reflación se está desacelerando en ambos lugares y desangrando al mercado global
El gráfico adjunto destaca el endurecimiento continuo de las condiciones de crédito, lo que, según Shvets, complementa la idea de que la liquidez «ya comienza a agotarse».
Entonces, con todo esto en mente, ¿qué debe hacer un inversor? Shvets tiene algunas ideas de posicionamiento.
Dice que los traders deben enfocarse en factores de inversión como calidad, sostenibilidad y enfoques temáticos. También recomienda que adopten una estrategia de «erizo» que implique permanecer en un curso singular, en lugar de pasar de una idea a otra en busca de patrones significativos que podrían no existir.
En cuanto a las asignaciones geográficas específicas, a Shvets le gusta el noreste de Asia y dice que Macquarie tiene posiciones sobreponderadas en China, Corea, India y Taiwán.
«Mantenemos nuestro punto de vista de que ya no hay ‘lugares seguros’ y ese valor se transformó de una estrategia a largo plazo en una oportunidad comercial a corto plazo», dijo.
Carlos Montero
La Carta de la Bolsa