«Hay un nutrido grupo de inversores, estrategas, analistas, observadores y actores en los mercados, en general, como A.Edwards, Jim Reid, W.Butler, Icahn, Einhorn y otros más, que pronostican desde hace meses el Colapso Financiero Global debido a lo que ellos llaman fuerte desequilibrios globales y a la incapacidad de los bancos centrales por crear empleo e inflación. Existe un número muy alto de agitadores y meapilas que aconsejan desde hace años, justo cuando conocimos la quiebra de Lehman, apagar la luz y salir corriendo. Lo mismo sucedió el fatídico 11-S, cuando el mundo se conmocionó con los atentados a las Torres Gemelas de Nueva York. Si hubiéramos hecho caso a estos vendedores de Desgracias ahora estaríamos rasgándonos las vestiduras. Porque el Mundo no se ha detenido. La Rueda gira y cuando deje de girar, algo que el ser humano desconoce, incluidos determinados fieles a otras tantas creencias aztecas, que hace tiempo pronosticaron el fin del mundo, de nada valdrá tener uno o mil euros en el bolsillo…»
«Sí, lluvia de malos augurios: Los analistas de Goldman Sachs, dirigidos por Peter Oppenheimer, insisten en que el desastre financiero que comenzó hace siete años con el colapso del sector inmobiliario y de la banca de inversión en EEUU ha entrado en su tercera fase. Una nueva oleada que tiene sus raíces precisamente en la respuesta que se dio a las dos primeras -el colapso bancario y la crisis de la deuda soberana europea-, y que es parte del llamado ‘superciclo’ de deuda de las últimas décadas. Todos los bancos centrales, dice Goldman, se apresuraron a bajar los tipos de interés en respuesta a las dos primeras crisis de la deuda, alentando así a los inversores a acudir a los mercados emergentes. Y ahora que las tasas de interés podrían subir, se están produciendo salidas en masa de estos mercados y del de materias primas, lo que acabará por afectar enormemente a los emergentes…»
«De igual manera se explica El-Erian. Los mercados emergentes están «completamente tocados» y sus problemas tendrán efectos sobre el crecimiento de Estados Unidos y Europa, según ha advertido el asesor económico Mohamed El-Erian en una entrevista a CNBC. En ella, el ex CEO de Pimco ha señalado que las sólidas tendencias económicas en Estados Unidos podrían no bastar para compensar el crecimiento flojo en otras partes del mundo. «No es tan poderoso para arrastrar a todo el mundo», ha dicho…»
«Y hay más, pero recuerde que las Desgracias, que tanto se pronostican y aventuran, generalmente nunca suceden. Sí, duerma tranquilo. Las burbujas explotan cuando nadie lo espera. Lo mismo sucede con los crash. Es más, siempre es muy positivo que el miedo rodee la actividad de los mercados. El miedo guarda la viña. Pero no olvide, eso sí, que el crash o el estallido de la burbuja le pillará desprevenido, cuando esté durmiendo o sacando al perro a pasear. Las burbujas de activos son muy difíciles de identificar cuando están sucediendo. Muchas veces, solo son claras en retrospectiva…»
«Aquí entronca la Teoría de los Cisnes Negros: En el siglo XVII los europeos creían que solo existían cisnes blancos. Sin embargo, una expedición de descubridores británicos a Australia demostró que también había ejemplares de este tipo de aves con las plumas negras. Un hecho que se consideraba altamente improbable sucedió. Cuatro siglos después, en 2008, el matemático y ensayistaNassim Nicholas Taleb, aplicó este descubrimiento a los mercados bursátiles y creó la teoría de los «cisnes negros» en su libro «El cisne negro: el impacto de los altamente improbable». En este best-seller se advierte de cómo acontecimientos aparentemente inverosímiles pueden llegar a producirse y acarrear consecuencias devastadoras…»
«Taleb elaboró su teoría a partir de tres características principales. Para empezar, los «cisnes negros» en los mercados son improbables, hechos que sorprendan a analistas. Además, originan efectos relevantes que se reflejan en fluctuaciones importantes de los mercados. Por último, estos sucesos tienen la capacidad de crear todo tipo de teorías que, a posteriori, explican porqué se llegaron a producir…» me dice uno de mis gurus favoritos.
Moisés Romero
Fuente: La Carta de la Bolsa