A. Eastwood, analista londinense, me dice que «normalización monetaria y segunda Gran Rotación desde los bonos a la Bolsa van a ser los términos de moda en los próximos meses. Varios miembros de la Reserva Federal ha reiterado su deseo de que se inicie ya una reducción del balance de 4,5 billones de dólares de bonos del Tesoro y activos respaldados por hipotecas, al mismo tiempo que han formalizado su compromiso con un alza en los tipos de interes. En Europa, las voces hacia este mismo proceso se oyen cada vez más fuertes y claras en Alemania. La normalización también llegará a Europa antes de lo que muchos se creen. El término Gran Rotación ha ocupado decenas de análisis y comentarios en todo el mundo durante los últimos años, y han sido claves en el comportamiento de miles de gestores profesionales. Con ella se define el proceso por el que los inversores, después de años de tendencia alcista en el mercado de bonos, traspasan paulatinamente sus posiciones en el mercado de renta fija al de renta variable. En el pasado la Gran Rotación ha sido fallida en muchas ocasiones. Los bonos seguían acaparando fuertes posiciones compradoras y aumentando sus precios a niveles que muchos consideran como burbujas. Eso parece que finalmente ha cambiado y que ¿por fin? Europa va a ser la gran receptora de fondos (ver gráfico adjunto).
El equipo de renta variable europea de Invesco en Henley, dirigido por Jeffrey Taylor, ha elaborado un informe sobre el crecimiento económico de la eurozona y su impacto en las valoraciones de las acciones. Desde su punto de vista, la novedad es que se comienza a apreciar un aumento de la presión sobre la capacidad de producción, lo que puede acelerar el incremento de los precios que ya se observa en determinadas partes del ciclo de producción. Para el equipo, un entorno más inflacionista con un mantenimiento del momentum de crecimiento puede ser muy favorable para la parte value del mercado europeo de renta variable.
“La economía de la eurozona no está mostrando ninguna señal de debilidad, con todos los indicadores de actividad mostrando datos positivos. El último dato ha sido el índice PMI, que ha mostrado que la actividad económica en Francia, Alemania y la eurozona está en máximos de varios años, acelerando su subida y batiendo todas las expectativas. El repunte se ha mantenido fundamentalmente basado en unas tasas de crecimiento de la producción similares en los sectores manufactureros y de servicios. Los datos también han señalado que las compañías de la región crean empleo al mayor ritmo en 17 años. El bloque de 19 países ha visto como el desempleo ha caído desde niveles récord y disfruta de la mejor expansión sincronizada desde la creación de la moneda única”, subrayan.
Mar Revuelta
La Carta de la Bolsa