Me gustaría hacerles la siguiente pregunta: ¿Dónde invertiría su dinero si no lo necesitara en los próximos 10 años? Le dejaré un momento para pensar.
Probablemente haya elegido como primera opción bienes inmuebles, al menos así lo es para el mayor porcentaje de personas que han realizado diversas encuestas a este respecto, luego lo mantendría en activos líquidos o caja, y en tercera posición en el oro, ¿es así?
Recientemente Barrons publicó una encuesta realizada a más de 1.000 estadounidenses en la que se les preguntaba precisamente eso. Los resultados los publicamos en el gráfico de abajo:
Voy a sacar varias conclusiones de los resultados de esta encuesta:
- – El 28% de los estadounidenses dijeron que su primera opción era el mercado inmobiliario, seguido con el 23% por la liquidez, y en tercera posición con el 17% en el mercado de acciones.
- – Entre los millennials el porcentaje en renta variable es aún más bajo, sólamente el 13% de ellos dijeron que invertirían su dinero en el mercado de valores, frente al 30% en inmuebles y el 30% en efectivo. Incluso el oro, con un 17%, superó a la renta variable.
- – Para los Baby Boomers la renta variable era la segunda opción preferida.
La elección de los inversores no corresponde a la evolución de los distintos mercados en el tiempo, y no es lo que se cabría esperar después de que el S&P 500 lleve en una clara tendencia alcista desde 2009, y haya subido más del 75% en los últimos cinco años.
Según un estudio realizado por los profesores de la London Business School, entre 1900 y 2011 el mercado de la vivienda sólo subió un 1,3% anual después de inflación, mientras que el mercado de acciones subió cuatro veces más.
En el siguiente gráfico comprobamos que el mercado de valores ha sido, por mucho, el más rentable en los últimos cinco años. A pesar de ello, los inversores en EE.UU. siguen reacios a invertir en él, no sólo ahora, lo cual podría tener sentido por los altos niveles alcanzados, sino en todo este movimiento alcista.
Tras el estallido en el 2000 de la burbuja tecnológica, y las crisis financieras e inmobiliarias de 2008, muchos analistas advirtieron que la bolsa tardaría muchas décadas en volver a recuperar el favor del público, y así está siendo.
Carlos Montero
La Carta de la Bolsa