En Wall Street se empieza a pensar que la Fed podría estar preocupada por la incidencia de un dólar fuerte en la economía, hecho que de ser cierto podría llevar a la Fed a retrasar la subida de tipos de interés, no en vano este fue uno de los motivos de que a primeros de año pospusieran su decisión.
De todas formas, el billete verde no presenta la fortaleza suficiente como para que este argumento cobre demasiado sentido en estos momentos.
La aparición de los primeros sondeos y encuestas que darían ganador a Trump es lo que lleva hundiendo a las Bolsas estos últimos días.
La volatilidad está haciendo de presencia y eso repercute en los mercados. El indicador Vix, aunque sigue por debajo de 20, se está acercando peligrosamente a dicha cota. Esto es relevante puesto que a partir de una lectura de 20 refleja temor y nerviosismo entre los inversores.
Es más, en septiembre el Vix alcanzó los niveles que tenemos esta semana y las Bolsas cayeron con fuerza.
Técnicamente hablando, hay dos aspectos claves a comentar:
– Europa: les vengo comentando desde hace unos meses que la señal de que las Bolsas del Viejo Continente tendrían fuerza y saldrían del rango lateral rectangular en la que llevan inmersas desde el pasado verano, sería que el Eurostoxx (futuro) rompiese por arriba su resistencia de los 3100 puntos, que mientras esto no sucediese, aunque otros mercados rompiesen sus respectivas resistencias, se corría el riesgo de ser un falso movimiento.
Por el momento, pese a que Dax e Ibex amagaron de manera falsa, Eurostoxx tocó los 3100 puntos y empezó a caer con fuerza, en un nuevo intento fallido por superar su resistencia.
Así pues, las Bolsas europeas aún no activaron señal de fortaleza y toca esperar.
– Estados Unidos: el martes el S&P500 (futuro) empezó a perder su soporte de corto plazo, concretamente los 2113 puntos. El miércoles abrió la sesión por debajo de dicha zona, confirmando la rotura oficial.
Esta es una señal de debilidad bajista, toda pérdida de un soporte implica riesgo potencial de caídas en los mercados, y si se trata del mercado más importante del mundo, es inevitable que suponga consecuencias para el resto de Bolsas mundiales.
Así las cosas, ¿qué escenario tenemos por delante?
Ayer la Fed decidió mantener los tipos de interés, algo con lo que contaba el mercado, de hecho los futuros de los fondos federales reflejaban una posibilidad del 13-14%.
Es un hecho que la Fed nunca quiere interferir en política. Es por ello que desde el mes de febrero les vengo indicando que antes de diciembre en ningún caso veríamos subidas de tipos de interés, ya que optarían por esperar a que se celebrasen las elecciones presidenciales del país.
Es ahora, en la próxima reunión de diciembre, cuando tenemos el primer set point, la primera oportunidad real.
Es cierto que los inversores llevan descontando una inminente subida de las tasas, por lo que en mi opinión, cuando llegue el momento, los mercados reaccionarán pero en el corto plazo, no debiera de suponer grandes cambios.
Lo que en cambio sí podría implicar movimientos severos, sería el resultado de las elecciones
Y es que una victoria de Trump sería el peor escenario para los mercados y las caídas podrían alcanzar fácilmente el -10%, siempre hablando de las Bolsas norteamericanas, en Europa tendríamos efecto contagio con caídas también significativas, mientras que el precio del oro subiría como activo refugio y el petróleo podría verse lastrado a la baja.
Ismael de la Cruz
ismaeldelacruz.es