A Intel le ha venido de perlas la ayuda federal de Biden porque se beneficiará de la política demócrata de fabricar chips «made in USA» con su respectiva carga de unos cuantos miles de millones de dólares y luego también pues el interés de QUALCOMM por quedarse con ella, en fin dos buenas noticias corporativas que pueden catalizar una subida incluso este año del 24% que es lo que le falta para tapar el brutal gap de agosto pasado.
Ahora bien para ello no puede volver a decepcionar en sus resultados del tercer y cuarto trimestre. Para nosotros la señal de compra la generó hace tres o cuatro sesiones al confirmar un suelo en batman invertido que por cierto si a partir de ahora Intel pita el objetivo sería el origen del movimiento zona 36 dólares un buen pellizco vamos.
Pero claro si no mejora resultados los inversores se enfrían.
Autor: Bolsacanaria