Es indudable que las palabras de Jerome Powell, presidente de la Fed, pronunciadas el lunes, han tenido un efecto importante en los mercados. El funcionario expresó que si el banco central espera a que la inflación baje al 2% anual para entonces comenzar con los recortes, la espera será demasiado larga.
Esas palabras fueron tomadas con euforia por Wall Street. Los operadores descuentan, en buena parte, que la Fed comience a recortar la tasa de interés, actualmente en el 5.5%, en la reunión de septiembre, algo que había quedado dejado de lado el mes pasado. Los pronósticos en esa dirección llegan al 90%, y aún falta la reunión del 30 de julio, junto con las cifras de empleo, inflación y ventas minoristas de julio y agosto antes de tal fecha.
Las cifras de ventas minoristas, que crecieron el mes pasado, no alcanzaron para cambiar la visión de los mercados. Ello explica el fuerte impulso del índice Dow Jones, que llegó nuevamente a máximos históricos, acompañado de cerca por el S&P 500 y el Nasdaq 100, cuyas acciones crecieron en menor medida.
De todas formas, la nota más destacada del martes la dio la onza de Oro. El metal precioso, que venia dando muestras de fortaleza en los últimos días, alcanzó un nuevo máximo histórico en 2469.70 dólares, y el mismo parece fácilmente vulnerable en las primeras horas del miércoles.
El Oro se ha visto ampliamente favorecido por la baja de los rendimientos de los Bonos del Tesoro, que llegaron, tanto en las notas de 2 como de 10 años, a mínimos que no tocaban desde marzo.
La zona de 2500 dólares aparece ahora en el horizonte cercano para el Oro, no obstante lo cual la sobrecompra extrema que presenta en el gráfico de 4 horas, con una demanda cercana al 90%, podría anticipar una corrección bajista importante. En dicho caso, la zona de 2420 dólares será el soporte a tener en cuenta, considerando la gran amplitud de precios que habitualmente presenta el Oro.
En cuanto a las monedas principales, se mueven dentro de rangos conocidos. El Euro no pudo superar 1.0905, y para consolidar su actual tendencia alcista deberá quebrar 1.0930. La proximidad de la reunión de política monetaria del Banco Central Europeo (jueves por la mañana) hará que la moneda única se mueva con un tono cauteloso durante las próximas horas. El quiebre de 1.0870 le pondría una pausa al alza del Euro, con un siguiente soporte en 1.0830.
La Libra esterlina, en tanto, no puede quebrar la zona de 1.3000, lo cual la favorecería ampliamente. La moneda británica se ha movido en forma lenta en la víspera, y luce sobrecomprada en el corto plazo. Una corrección bajista encontrará soporte en 1.2920, un nivel que podría aprovechar para tomar nuevamente impulso alcista.
La baja en los rendimientos de los bonos no impidió una nueva caída del Yen. La moneda nipona había logrado recuperarse cerca de 157.30 el viernes pasado, y el lunes apuntó nuevamente a tal nivel. El precio actual, de 158.25, parece darle impulso al yen para las próximas horas, aun cuando deberá quebrar con fuerza 157.80, un firme soporte de corto plazo.
El calendario de noticias incluye una batería de datos que habitualmente no tiene impacto en los precios, como el índice de producción industrial y utilización de capacidad instalada, permisos e inicios de viviendas. Solo el Libro Beige de la Fed, previsto para las 2:00 pm del este podría mover en forma moderada al Dólar en sus pares principales.
Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el jueves.