BBVA, uno de los principales bancos españoles con una presencia significativa en México y Turquía, está bien posicionado para beneficiarse del potencial de crecimiento de estos mercados emergentes. La entidad tiene un balance sólido, una rentabilidad creciente y distribuye un dividendo saludable.
Por Darío García (XTB)
Actualmente tiene una fuerte presencia en México y Turquía, dos mercados emergentes con alto potencial de crecimiento. Un excelente balance y una rentabilidad creciente, paga un dividendo atractivo para los inversores y es más barato que sus competidores en términos de precio sobre el valor contable y el precio sobre las ventas.
Este contexto donde su presencia en países emergentes ha supuesto un riesgo, puede generar el factor diferencial para los próximos retos de los países desarrollados.
Además, y precisamente por lo anterior, puede ser una buena alternativa para los inversores que quieren tener exposición a mercados emergentes y que buscan un banco con un balance sólido, rentabilidad creciente y un dividendo saludable.
Desde el punto de vista fundamental, BBVA está sobrevalorado según la valoración de rendimiento excesivo, pero esto se compensa por el hecho de que es más barato que sus competidores en términos de precio a valor contable y precio a ventas.
Además, la entidad se enfrenta a la competencia de los neobancos, pero es uno de los mejores bancos tradicionales en términos de presencia digital.
BBVA ha sido capaz de mantener sus costes estables frente a la inflación, lo cual es un logro notable.
En este contexto y en conjunción a la estructura técnica actual, creemos que sería interesante una entrada limitada en 7,6 euros, por encima de la zona de resistencia actual. El stop se situaría por debajo del mínimo anterior más reciente, en los 7 euros por acción.
En función del perfil inversor, encontramos 3 zonas de beneficio en niveles clave en la cotización de BBVA: los 7,93 euros, los 8,27 euros y los 9,39 euros.
Análisis realizado por los analistas de XTB