Después de un lunes con escasos movimientos, se esperaban fuertes oscilaciones en la sesión asiática del martes. Y el mercado no decepcionó. El Banco de Japón publicó su último anuncio de política monetaria del año, generando una fuerte recuperación del yen. 
El BoJ dejó sin cambios, como se esperaba, la tasa de interés negativa (-0.1%), pero amplió el rango máximo de los rendimientos de los bonos locales al 0.5% desde el 0.25%. El cambio determinó un repentino interés por el yen, ante la expectativa de los inversores de un endurecimiento de la política monetaria en los próximos tiempos. Cabe acotar que los fuertes estímulos que mensualmente inyecta el banco central en la economía no sufrieron cambios, aunque trascendió que ello podría suceder en la primera mitad de 2023.
Este movimiento generó cambios grandes en las paridades líderes. Además de ganar casi 700 puntos ante el dólar, el yen se fortaleció en mayor medida aún ante la libra esterlina, que sigue dejando dudas, y que en la víspera se mostró débil e incapaz de superar 1.2200. Sin dudas, el par GBP/JPY vuelve a ser protagonista en el mercado, como lo fuera más de una década atrás. Entre 2007 y 2008, cuando la paridad tocó su máximo en 251.00, el cruce cayó más de 13,000 puntos, siendo el movimiento más importante que quien suscribe haya visto en los últimos 22 años.
El euro también da algunas ventajas, y si bien intenta mantenerse sobre 1.0600 (intentó superar 1.0660 sin éxito) pareciera no tener todos los favores del mercado. En su caso, la caída ante el yen se hizo menos visible, pero igualmente importante.
El yen se vio debilitado durante gran parte del año por la inacción del BoJ, por el aumento de la energía siendo Japón importador neto y por la apreciación del dólar que a su vez aparejó un aumento a máximos de 15 años de los rendimientos de los bonos del Tesoro de corto y largo plazo. La baja de la moneda nipona superó los 4,000 puntos, tomando como referencia la zona de 110.00, precio anterior al inicio de la guerra en Ucrania, y nivel que exhibía antes de la pandemia. De esos 4000 puntos ya recuperó la mitad, y en la zona de 128.90 (61.8% de retroceso del último rally del cruce USD/JPY medido en el gráfico mensual) encontrará un duro escollo. De todas formas, los bancos de inversión prevén una apreciación mucho más importante del yen durante 2023.
El alza del yen llevó al oro a superar con claridad los 1800 dólares, algo lejos aún de los máximos del mes en 1824, pero inyectando confianza en la onza para las próximas sesiones. La plata superó los 24 dólares, y el platino intenta quebrar los 1000 dólares, nivel que le está resultando difícil de pasar.
Este miércoles, los datos de inflación de Canadá de noviembre impactarán de lleno en el alicaído Loonie, que lucha por no caer a 1.4000 ante la manifiesta debilidad del petróleo. Además, el índice de confianza del consumidor del Conference Board le dará ritmo al mercado, aunque será la apertura de Wall Street, que sumó un martes de pérdidas muy duras (algunas acciones, como Tesla, pasan momentos muy delicados), y que ve alejar de este modo el esperado rally de Navidad.
Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el jueves.
Adrián Aquaro
Trader College
