Nvidia ha sido una de las últimas tecnológicas estadounidenses en presentar su informe de resultados.
La compañia no sorprendió con unos resultados que fueron mixtos y en donde las caídas en los mercados de criptomonedas y la transición de Ethereum que dejó de ser una criptomoneda minable, impactaron negativamente en las ventas de sus tarjetas gráficas.
A pesar del incremento de ingresos por su división de centros de datos, los beneficios se redujeron con fuerza. A pesar de ello, la compañía sigue siendo positiva y la adaptación de gran parte de su negocio a ofrecer servicios en la nube le han permitido revalorizarse prácticamente un 50% desde los mínimos más recientes.
Análisis realizado por el analista de XTB Dario García