Los objetivos vendrían marcados por las resistencias de los dos procesos laterales anteriores con perspectivas temporales diferentes.
Por Darío García (XTB)
La cotización de Alibaba ha dado un vuelco tan importante que los inversores se han apresurado a aprovechar. Supone un giro de 180 grados de la tendencia que mantenía desde finales de 2020.
Cuando su fundador, Jack Ma, mantuvo una lucha con la administración china -que tiene su origen en la guerra comercial entre el gigante asiático y EEUU- una vorágine de presiones y sanciones directas a la compañía eliminó cualquier atractivo de inversión.
De hecho, una de las preocupaciones de los inversores ha sido que fuera excluida de la bolsa norteamericana y que su ADR fuera eliminado del Wall Street.
Pero algo ha cambiado. Desde el punto de vista técnico, tras romper la directriz bajista marcada por el canal descendente, y tras cuatro señales de divergencias alcistas desarrolladas durante estos últimos dos años, finalmente se ha confirmado la señal.
Por ello, la oportunidad de entrada se daría a precio de mercado, en los 120 dólares por acción, con un stop situado en el nivel de rotura de la resistencia del canal anterior, es decir, en los 100 dólares.
Los objetivos vendrían marcados por las resistencias de los dos procesos laterales anteriores con perspectivas temporales diferentes. Para un proyecto de corto plazo, la resistencia anterior en los 140 dólares marcaría la recogida de beneficios, marcando una operativa con ratio 1:1.
El segundo objetivo estaría marcado por la resistencia generada entre agosto y noviembre de 2021 que coincide, además, con los mínimos de 2020, provocados por el impacto de la pandemia. El precio objetivo serían los 180 dólares por título, dejando el ratio de la operación para medio plazo en 4:1.