Si bien el comienzo de semana dejó poco para el análisis por el festivo en Estados Unidos, es claro que impera en los mercados un sentimiento de optimismo, basado en el avance del plan de vacunación en el hemisferio norte, y en la recuperación económica que traerá el alivio en la evolución de la pandemia.
Los casos van retrocediendo pese al invierno boreal, y en buena parte influye que en Estados Unidos y Europa, sobre todo en Reino Unido, el plan de vacunación avance a paso firme. Si bien la pandemia no está controlada, y siguen apareciendo variantes temibles en diversas latitudes, el grueso de los contagios está cediendo.
La expectativa por la recuperación económica global se ve en el precio de algunas materias primas. Esta vez prima la lógica, y al petróleo en máximos de 13 meses, le siguen la plata y el platino, metales vinculados con la producción, con un fuerte crecimiento. El platino, por caso, ya se ubica en máximos de enero de 2015. El oro, en cambio, no acierta a encontrar el rumbo de crecimiento adecuado, y así como logra sobresalir en algunas oportunidades, no logra escapar a sus mínimos del año con claridad. El umbral a superar para la onza aparece lejos, en la zona de 1900 dólares, y le costará llegar a dicho nivel, dado que está siendo dejado de lado como activo de inversión, ante la frenética búsqueda de riesgo por parte de los inversores.
Aún sin la bolsa de Nueva York en funcionamiento, los futuros de los índices más importantes no tuvieron dificultades el lunes para alcanzar máximos históricos, esta vez exacerbados por la falta de volumen, típica de un día festivo. Esta situación pone a las claras que el movimiento de los índices es forzado, y se estira a límites no muy claros. Lo que sí es claro es que cuando se produzca una corrección bajista de importancia, la misma será profunda, y no limitada a tímidas tomas de beneficios, como las que hemos visto las semanas anteriores.
En cuanto a las monedas principales, las europeas marchan a la cabeza de un nuevo ataque contra el dólar, cuya recuperación fue solo un espejismo la semana pasada. El euro apunta a 1.2250 / 1.2300, en tanto la libra tiene su destino de corto plazo por encima de 1.4000. El franco suizo, que adelantó su rally a máximos de 6 años el mes pasado, y realiza una extraña trayectoria en febrero, también se perfila al alza en estas horas.
Respecto a las monedas “commodities”, el dólar australiano y el dólar neocelandés aprovechan la ola de optimismo en torno a la economía china, en tanto el dólar canadiense se ubica cerca de un máximo de casi tres años, impulsado por el alto precio del petróleo.
Los futuros del petróleo WTI recuperaron su nivel anterior a la pandemia, y se acercan ahora a sus máximos de 2020, que rozaron los 65 dólares; claro que dicho nivel no fue alcanzado por la bonanza económica, como puede suceder ahora, sino por los cruentos incidentes ocurridos en Irak, entre fuerzas estadounidenses e iraníes, cuyas consecuencias fueron dramáticas, aunque menos graves de lo que en un primer momento podía suponerse.
Sin datos importantes de Estados Unidos, la sesión americana de este martes tendrá su principal hito en la apertura de Wall Street, a las 9:30 del este. Allí se definirá si la corrección bajista de la bolsa más importante del mundo es tan inminente como parece, o aún quedan algunos días más de ganancias consecutivas.
Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el miércoles.
Adrián Aquaro
Trader College