Va a costar encontrar, tanto en los calendarios pasados como en los que vienen, una semana como la que se inicia. La campaña presidencial en Estados Unidos llega a su fin, y el martes tendremos el evento del año, el cierre de las elecciones, que comenzaron hace bastante tiempo, con los votos por correo.
Los contendientes, el actual presidente Donald Trump y el opositor Joe Biden, llegan cabeza a cabeza en la realidad, aunque las encuestas favorezcan al demócrata. Y ambos tienen tantos argumentos para defender una postura ganadora como para pensar en una derrota sin atenuantes.
Lo cierto es que los mercados presentan un comportamiento muy volátil, aunque no tanto como uno podría imaginarlo en estas circunstancias. Las elecciones pesan, por supuesto, y son lo más importante, porque define lo que sucederá en Estados Unidos (y todo lo que allí se define para resto del mundo) por lo menos para 4 años más. Si gana Trump, solo serán 4 años. Si gana Biden, bueno, es difícil imaginar que quedará 8 años en el poder, cuando le cuesta hilvanar dos frases seguidas antes de un eventual primer mandato.
Pero además de las elecciones, no dejan de llegar malas noticias desde todas partes en relación a la pandemia. En Europa, ahora fue el turno de Boris Johnson, primer ministro de Reino Unido, de imponer restricciones al comercio y a la circulación de personas, luego de que se registraran más de 100.000 contagios del virus en pocas horas. Esto se suma a medidas similares, y más duras en algunos casos, impuestas en Alemania, Francia y España.
En Estados Unidos también se registran récords de casos del virus, y esos casos se exacerban en momentos como este, cuando se define el futuro político del país, y con un manejo bastante torpe de la situación por parte del gobierno.
Pero como si la elección del presidente no bastara, tendremos también una batería de datos y eventos de primera línea. Este lunes, el ISM de manufacturas ratificará el buen momento del sector, con más de 55 puntos (en la recuperación de la economía radican los principales argumentos del presidente Trump).
En la sesión asiática del martes, el Banco de la Reserva de Australia dará a conocer su anuncio de política monetaria, con un recorte de tipos de interés previsto (del 0.25 actual al 0.1%). ¿Tendrá lugar finalmente este recorte? Todo indica que sí, pese a que la inflación de septiembre, conocida hace unos días, ofreció cifras mejores que las esperadas.
El martes, como quedó dicho, tenemos las elecciones. El miércoles será publicado del ISM de servicios, el dato que tal vez refleja el crecimiento económico con mayor elocuencia. Y se conocerá también la encuesta ADP de empleos privados de octubre.
¿Le parece que falta algo? La Fed también tiene su reunión. Esta vez se pasa para el jueves, cuando el presidente Powell brinde su conferencia de prensa, para dejar sin cambios los tipos de interés, algo que se repetirá durante un buen tiempo, y poner las herramientas de la entidad a disposición de la economía, como lo repite encuentro tras encuentro.
Y queda reservado para el viernes el dato de empleos del Departamento de Trabajo, que se espera con una modesta creación de 600 mil empleos el mes pasado.
En el medio, el Banco de Inglaterra dará a conocer su anuncio de política monetaria, aunque de aquí al jueves es imposible deducir el precio de la libra esterlina. La tradicional moneda británica se encuentra muy presionada por la pandemia y también por el Brexit, que es el evento que viene.
Con este panorama iniciamos este increíble mes de noviembre. La bolsa de Nueva York se ha mostrado ciertamente bajista en los últimos días, aunque no es sencillo deducir los motivos que la han llevado a estos niveles. Entre la pandemia y las elecciones, las especulaciones son infinitas. Lo mejor será esperar los eventos y luego tomar acción. Como siempre.
Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el martes.
Adrián Aquaro
Trader College