Comienza una nueva semana, con el dólar intentando recuperar posiciones luego de algunas sesiones de dudas. La moneda norteamericana se mostró algo volátil la semana pasada, sobre todo a partir de la presentación de Jerome Powell, presidente de la Fed, que tuvo lugar el miércoles.
El euro, por caso, amagó superar claramente 1.1900, pero terminó desdibujado; la libra esterlina, en tanto, no logra despegar del laberinto del Brexit, que la tiene a maltraer. El yen, por su parte, sigue fuerte, luego de la designación del Sr. Suga como primer ministro de Japón.
La semana que se inicia tendrá algunos atractivos que podrían llevar a las divisas a tomar un camino más claro. El euro tiene por delante la publicación de los datos de manufacturas de Alemania, Francia y la Eurozona, a cargo de Markit. El dato clave es, sin dudas, el de Alemania. Y podría no decepcionar a los mercados si, como se espera, queda por encima de los 52 puntos, lo que representaría el tercer mes consecutivo de expansión del sector. Cifras similares podrían presentar Francia y toda la Eurozona.
Respecto a la libra esterlina, mantiene un perfil bajista, en parte provocado por el Brexit, y también como consecuencia del comunicado de política monetaria del Banco de Inglaterra, y de la posibilidad, algo remota, de que la entidad implemente tasas negativas en el futuro. Durante el fin de semana, además, hubo reportes de un rebrote récord de varios meses en los contagios del virus, lo cual podría llevar a las autoridades a implementar nuevas medidas de restricción a la circulación de personas, algo que los británicos quieren evitar a toda costa. Respecto al Brexit, se acercan días decisivos, y se supone -o se espera- que Londres y Bruselas lleguen a algún tipo de acuerdo para evitar una salida a los portazos de Reino Unido. Algún acuerdo podría derivar en un alza de la libra.
En cuanto a las materias primas, son muchos quienes opinan que la onza de oro puede dispararse en cualquier momento. La Fed no dejó dudas acerca de que seguirá emitiendo el tiempo que considere necesario, y que la tasa seguirá baja por al menos 3 años. Los pronósticos respecto al alcance de un probable rally del oro van desde los 2200 a los 3000 dólares para un año hacia adelante. Algo que es incierto, pero que muestra las pocas dudas que hay acerca de un crecimiento del precio de la onza. Detrás de ella irá la plata, y en menor medida el platino.
La bolsa de Nueva York no tuvo la mejor de sus semanas. Luego de amagar con alcanzar máximos históricos, los futuros del índice Dow Jones cayeron durante varios días consecutivos, y se movieron poco durante la semana anterior. Todos los índices presentaron un panorama similar. Las elecciones -o más bien la caliente campaña que enfrenta al presidente Trump con el opositor Biden- influirán en el clima de negocios. La impresión que da es que las encuestas no dicen toda la verdad. Algunas siguen favoreciendo a Biden, pero otras ya dan un empate entre ambos candidatos.
Este lunes asoma como un día sin muchos atractivos, con una nueva presentación de Jerome Powell, que sin embargo no tendrá mucho impacto en los precios. Salvo algún hecho excepcional, será un día tranquilo, con el dólar intentando, nuevamente, retomar el dominio del mercado.
Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el martes.
Adrián Aquaro
Trader College