El analista advierte de que el gigante del comercio electrónico “podría experimentar una serie de correcciones” para consolidar beneficios.
Por Álvaro Giménez-Cuenca (XTB)
Amazon continúa siendo una de las compañías con mayor potencial de crecimiento en el mercado a nivel mundial después de 26 años cotizando.
Actualmente, las acciones de Amazon, acumulan una revalorización del 13,29% desde su debut en bolsa en 1997, y con perspectiva alcista en el largo plazo.
La tecnológica nace de una OPV en Wall Street a un precio de 18 dólares por acción, con una capitalización inferior a los 500 millones de dólares. Actualmente, el valor se ha multiplicado por más de 130 veces.
La compañía marca la diferencia con el resto de competidores y, mientras otras empresas del sector sufren una crisis debido a la pandemia mundial que estamos viviendo, la compañía fundada por Jeff Bezos continúa fortaleciendo su negocio. La capitalización supera el billón de dólares americano y logró aumentar sus ingresos en un 26% durante el último trimestre.
A nivel técnico, el movimiento correctivo del valor supone una nueva zona de soporte en el corto plazo.
Situamos el objetivo principal en los 2.500 dólares. Una vez consolidados, Amazon podría dirigirse hacia la barrera psicológica de los 3.000 dólares. Si bien es cierto que, dada la trayectoria alcista que viene dibujando, la acción podría experimentar una serie de correcciones fruto de la consolidación de beneficios por parte de los inversores.
Aun así, el Covid-19 puede seguir evolucionando y una posible restricción del funcionamiento de la compañía podría alterar la evolución de la cotización. Por ello, situamos un stop loss en los 2.254 dólares.