Los datos de inflación de julio en Estados Unidos mostraron una baja, esperada, respecto al mes anterior. Una de las mediciones, la que excluye alimentos y energía en términos interanuales, quedó incluso por debajo de los pronósticos, cayendo al 2.9% anual frente al 3% esperado.
Sin embargo, las cifras no parecieron conformar a los mercados. Después de los primeros caóticos días del mes, la impresión es que los operadores esperaban cifras más contundentes, que condujeran a la Fed a un recorte de tasa agresivo en septiembre.
De esta manera, todo indica que el banco central iniciará sus recortes el mes próximo, pero de manera moderada, de no más de un cuarto de punto, para evitar rebrotes inflacionarios.
Esta presunción deja de lado, al menos por ahora, que el mercado laboral ofreció en julio (dato conocido hace dos viernes) su peor cifra en más de tres años en la tasa de desempleo, y la menor creación de empleo desde noviembre de 2020. También omite que las cifras de manufacturas medidas por ISM quedaron en su nivel más bajo en un año.
La bolsa de Nueva York festejó las novedades de la víspera, esperando un recorte de la Fed, aunque la reacción tampoco fue eufórica. El índice Dow Jones llegó a su nivel más alto desde el 2 de agosto, borrando las pérdidas que sufrió desde entonces, y un comportamiento similar mantuvieron el S&P 500 y Nasdaq 100.
El Dólar cedió ligeramente en sus pares principales, acelerando su sesgo bajista ante el Euro, que llegó a un nuevo máximo anual en 1.1047. La sobrecompra que presenta la moneda europea en las primeras horas del jueves invita a pensar en una corrección bajista, que podría tener lugar durante la sesión americana. En dicho caso, la zona de 1.0970 será el primer soporte, con siguiente objetivo en 1.0930. La superación de 1.1045 le dará al euro impulso para buscar 1.1070 y 1.1110, próximas resistencias.
La Libra esterlina, en tanto, apenas pudo sacar provecho de los datos de inflación. Horas antes de los mismos se conocieron las mismas cifras en Reino Unido, con resultados menores a lo esperado. Si bien la Libra reaccionó al alza, su fortaleza se apagó en horario americano, y apunta a la baja para las próximas horas, con un soporte inmediato en 1.2800, seguido de 1.2780.
El Yen, por su parte, cae ante el dólar en las primeras horas del jueves, luego de una recuperación efímera con los datos de inflación antes mencionados. El precio actual del par USD/JPY de 147.30 deja al cruce sin una tendencia clara, y a la espera de otros datos importantes. El quiebre de 146.50 le daría un impulso alcista de corto plazo a la moneda nipona.
La onza de Oro sufrió una fuerte baja en la sesión americana, y rebotó recién en 2437 dólares, donde encontró soporte en el 38.2% de su alza anterior, que la había dejado al borde de sus máximos históricos (tocó 2480 dólares frente a los 2483 del 17 de julio). El metal precioso mantiene un sesgo alcista marcado, y probablemente busque dichos máximos durante las próximas horas.
El calendario de noticias incluye el crucial dato de ventas minoristas de julio. Se espera que las mismas hayan crecido un 0.4% el mes pasado, aunque las que excluyen ventas de vehículos solo lo harían en un 0.1%. Si estos pronósticos se cumplen el dólar tendrá un fuerte respiro durante el resto de la semana.
Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el viernes.