Acabamos de dejar atrás las que posiblemente han sido las semanas más tranquilas en lo que va de año para las divisas del G10.
Esperamos que las próximas dos semanas sean lo contrario a las dos anteriores. La reunión de junio del BCE abrirá el mes, seguida al día siguiente por el informe de empleo de mayo de EE.UU. y, a continuación, el informe de inflación de EE.UU. a principios de la semana que viene. Además, los mercados se enfrentarán a las consecuencias de las elecciones en Sudáfrica, México y la India. Como siempre, los datos de inflación en Europa y EE.UU., y la reacción de los bancos centrales ante ellos, siguen siendo clave. El incesante retroceso de las esperanzas del mercado de que se produjeran recortes significativos en 2024 no ha beneficiado a las divisas de alto riesgo en general, y a las de los mercados emergentes en particular.
EUR
Es casi seguro que el BCE llevará a cabo un recorte de los tipos de interés de 25 puntos básicos en su reunión del jueves. Los mercados están de acuerdo en este punto. Sin embargo, la clave es el alcance y el calendario de cualquier recorte posterior, y ambos se han ido retrasando sin cesar en las últimas semanas.
Los datos de inflación de mayo conocidos la semana pasada volvieron a sorprender al alza, y parece claro que la tendencia a la desinflación al menos se ha detenido. El repunte de las presiones sobre los precios en el sector servicios es especialmente preocupante, impulsado por el aumento de los costes laborales y la demanda de los consumidores. Existe una gran incertidumbre sobre la interpretación que los responsables del BCE hacen de estas tendencias, y la rueda de prensa posterior a la reunión del jueves se perfila como el acontecimiento clave de la semana en los mercados de divisas.
USD
El informe de inflación del PCE de la semana pasada cumplió con las expectativas y fue ligeramente inferior al del IPC publicado a principios de mes. Esto fue suficiente para desinflar la subida semanal de los tipos de interés en EE.UU. y hacer que se mantuvieran sin cambios en la semana, empujando al dólar a niveles similares.
Esta semana debería ser mucho más interesante, y el informe de nóminas no agrícolas que se publica el viernes dominará un calendario muy cargado. Además de la cifra de creación neta de empleo, los mercados se centrarán en los aumentos salariales mensuales, para ver si la inflación de los servicios se traduce en mayores exigencias salariales por parte de los trabajadores.
GBP
La libra está resistiendo sorprendentemente bien a pesar del anuncio de las elecciones y de algunos indicios de enfriamiento en el sector servicios al que apuntan los índices PMI.
Las publicaciones de datos de esta semana son bastante escasas, dominadas por encuestas más que por cifras concretas. Debido a las elecciones del 4 de julio, el Comité de Política Monetaria del Banco de Inglaterra ha suspendido todas sus comunicaciones, excepto la reunión de junio. Esto significa que habrá pocos factores idiosincrásicos que guíen a la libra en los mercados y que, en gran medida, su cotización dependerá de lo que ocurra en otros lugares.