Indra (IDR:MC), la multinacional española especializada en tecnología y defensa, está teniendo un comportamiento histórico desde principios de año, subiendo cerca del 50% en su cotización.
En las últimas semanas ha presentado unos resultados extraordinarios con un crecimiento de los ingresos en el primer trimestre de un 22%, con todas sus divisiones alcanzando crecimientos de dobles dígitos. Otro de los puntos que mejor acogida está teniendo son las proyecciones de lo que queda de año y la ambición en su plan estratégico, en el que pretende incrementar su facturación hasta los 6.000 millones en 2026 y en 10.000 millones de euros en 2030, lo que supone duplicar el volumen actual.
Para ello, la compañía quiere reestructurar sus áreas de negocio y establecer una nueva estructura, dividida en Defensa, Gestión del Tráfico, Espacio, Minsait y nuevos negocios.
Precisamente el área aeroespacial y de defensa, debería verse beneficiada por las iniciativas europeas, de las que Indra forma parte. España como el resto de países de la OTAN tiene como objetivo alcanzar un gasto del 2% de su PIB en defensa, lo cual todavía le debería generar grandes beneficios.
Durante los últimos meses se ha especulado mucho con una escisión o la posible venta de Minsait, pero en el nuevo plan se plantea la posibilidad de buscar nuevos socios para aumentar la autonomía. Otro de sus principales objetivos será reforzar su presencia internacional, poniendo el foco en América del Norte y Asia – Pacifico.
También buscará promover el desarrollo de tecnologías relacionadas con la inteligencia artificial, el almacenamiento en la nube y la ciberseguridad, sectores en pleno crecimiento y sobre los que sustentará la base de su inversión.
Indra a nivel técnico
Su cotización ha roto sus máximos históricos alcanzados en 2007 y dados los fundamentales actuales, consideramos que podría continuar superando metas en los próximos meses.
Análisis realizado por los analistas de XTB