En medio de una semana que hasta el momento ha dejado poco para el análisis, el Dólar vuelve a ganar terreno ante las monedas principales. El Euro logró cerrar el martes apenas por encima de 1.0830, que ahora aparece como un soporte firme, pero delicado: su quiebre definitivo podría hacer trastabillar a la moneda única por debajo de los mínimos de la semana pasada en 1.0796.
Algo similar ocurre con la Libra. Con gráficos de 4 horas prácticamente calcados, la moneda británica vuelve a apuntar a 1.2600, nivel cuyo quiebre podría acelerar su caída. En los últimos días, en especial desde el jueves pasado cuando el Banco de Inglaterra dejó abiertas las puertas para un recorte de tipos de interés en los próximos meses, la Libra se vio presionada a la baja, pese a que hace menos de dos semanas circulaba por encima de 1.2900.
A propósito, parece acercarse el momento de hablar de otra guerra de monedas. Si la Fed, el BoE y el BCE recortan tipos de interés en simultáneo: ¿cuál de las monedas (dólar, libra esterlina y euro) quedará en pié?
Respecto al Yen, se mantiene en posición bajista muy marcada, cerca de sus mínimos del año en 151.85, que es apenas unos puntos debajo del mínimo de 35 años que tocó en octubre de 2022 en 151.90. Los movimientos de especulación en torno al Yen no cesan. El Banco de Japón aumentó la tasa de interés la semana pasada, con el mismo efecto que si la hubiera recortado. Japón advierte que puede intervenir en cualquier momento para preservar el valor de su moneda. A la larga, esto es lo que creemos va a ocurrir.
La onza de Oro volvió a crecer con fuerza el martes, para igualar la que fuera marca máxima histórica el 8 de marzo en 2195 dólares. Sin noticias que lo justifique, la onza cayó luego más de 20 dólares, algo que se vincula a la especulación entre formadores de precios más que al comercio de Oro en sí mismo. De escaso volumen y, por lo tanto, con un precio manipulable, el oro ha pasado de ser de un activo de refugio a un instrumento saponáceo, con movimientos imposibles de descifrar aún en plazos muy cortos.
En la bolsa de Nueva York, el índice Dow Jones se aleja de sus máximos de la semana pasada, con una tendencia bajista en el gráfico de 4 horas. El S&P 500 también apunta a la baja, con mayor acento, al igual que el Nasdaq 100. El S&P 500 mantiene un gap que no cubrió por debajo de los 5000 puntos.
La ausencia de datos importantes este miércoles hará que los mercados se muevan con cautela. Si bien habrá menor volumen por la Semana Santa, los datos de inflación por consumo (deflactor de inflación) previstos para el viernes ya son motivo de especulación por parte de los inversores.
Cabe acotar que ante el cierre de un trimestre, se desarman gran cantidad de posiciones, y que el dólar puede presentar movimientos de gran amplitud desde ahora y hasta el cierre de la semana.
Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el jueves.