El inicio de la semana dejó como saldo un nuevo crecimiento del Dólar en todos los frentes. El billete no encuentra un techo claro en estas horas, luego de una seguidilla de informes que lo han favorecido ampliamente.
A los datos de manufacturas y servicios, ambos muy por encima de lo esperado, se sumó el viernes un informe de empleos no agrícolas en su mejor nivel de un año. Por otra parte, las dos presentaciones del presidente de la Fed, Jerome Powell, mostraron que el banco central no tiene apuro alguno por recortar los tipos de interés, al menos hasta que la inflación muestre que se dirige al 2% anual. Actualmente, el costo de vida se sitúa en orden al 4%.
No extraña, pues, que el Euro, la Libra esterlina y el yen se hayan depreciado apenas iniciada la sesión asiática del lunes, para estirar sus pérdidas durante todo el día. El Euro llegó a 1.0723, idéntico mínimo al que tocó el 8 de diciembre pasado, y aún se mantiene en peligro de quebrarlo. En dicho caso, la zona de 1.0705 y, más abajo, 1.0680, nivel que no toca desde mediados de noviembre, serán los soportes a seguir.
De todas formas, el par EUR/USD dejó un gap en 1.0785 que no cubrió, y la sobreventa que el cruce presenta en los gráficos de muy corto plazo sugiere que puede producirse alguna corrección alcista que busque tal nivel.
La Libra esterlina llegó a un mínimo del 13 de diciembre el lunes, cayendo más de 240 puntos en apenas tres días. La moneda británica se ve afectada por distintos factores, aunque en las semanas anteriores se había mostrado más sólida que el euro. Las dudas sobre las próximas acciones del BoE chocan con la firmeza de la Fed, por lo que por el momento no será fácil que la Libra regrese por encima de 1.2700, que la dejaría en carrera para recuperar terreno más rápidamente.
El Yen retomó su tendencia bajista, con una brutal baja derivada de los datos de empleo de Estados Unidos del viernes. Luego de ensayar una recuperación -ficticia, anterior a los datos mencionados y, por lo tanto, inducida- la moneda nipona no puede defenderse ante los discursos de la Fed y una fuerte recuperación de los rendimientos de los Bonos del Tesoro. Podríamos decir que para operar con el yen no es necesario seguir su trayectoria, sino la de los rendimientos. Las notas de 10 años rebotaron el viernes en una larga línea de tendencia alcista medida en el gráfico diario, y se alejan de sus mínimos. El yen, en tanto, llegó el lunes a su mínimo desde el 28 de noviembre, y todo parece listo para acelerar su caída.
La onza de Oro pierde vuelo en estas horas, con un mínimo de 2015 dólares (cubrió un gap que había dejado la semana pasada). Lejos de un nivel de sobreventa, el quiebre de dicho nivel podría acelerar su baja, y poner en peligro la cota de 2000 dólares. El gap de 1922 dólares sigue intacto, y allí irá el metal precioso ante un nuevo embate del dólar.
La sesión del martes puede profundizar la corrección bajista que presentan los índices principales de la Bolsa de Nueva York. Tras tocar máximos históricos durante varios días consecutivos, era hora de una corrección.
Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el miércoles.
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