Unicaja obtuvo un beneficio de 285 millones de euros durante los nueve primeros meses del año, lo que supone un 4,9% más que en el mismo periodo del año anterior. Al igual que en el resto de entidades, este resultado se ha visto afectado por el impacto del impuesto a la banca, que en el caso de Unicaja le ha supuesto 63,8 millones de euros.
Este resultado ha estado impulsado por el aumento del margen de intereses, que ha crecido un 25,4% hasta los 973 millones de euros. Los ingresos por comisiones también ascendieron, pero en menor medida, un 5,9% hasta los 1.333 millones de euros, lo que supone un 30% del margen bruto.
Como nota negativa destacan la caída en los depósitos y en la demanda de crédito. En el caso de los depósitos, el descenso fue del 4,1% comparado con el año pasado y puede responder a la necesidad de algunos clientes de sufragar los efectos de la inflación o la búsqueda de una mayor remuneración. La demanda de crédito interanual sufrió un descenso del 17%, un dato muy destacado y que da muestras de los efectos del encarecimiento del dinero.
Unicaja cae en el acumulado del año un 2,42% y es junto a Bankinter la única entidad que cotiza en negativo en el acumulado del año. La desaceleración de la demanda de crédito en un momento en el que los márgenes de interés se encuentran en máximos de la última década supone un freno para los inversores.
El precio de la acción cotiza desde mediados de abril en un rango entre 1,10 y 0,87 céntimos. Una mala lectura de los resultados, podría llevarla a la zona comprendida entre 0,87 y 0,90 céntimos, que actuó como soporte de relevancia todo el año.
Análisis realizado por los analistas de XTB