Confirmando el divorcio absoluto de la bolsa de Nueva York con la economía, las acciones principales de Wall Street se desplomaron el jueves después de conocida la tercera y última medición del PIB del tercer trimestre, que quedó inusualmente por encima de lo esperado. Habitualmente, no se producen cambios relevantes, o son mínimos. La expansión de la economía le cayó mal a la bolsa.
El llamado “rally de Navidad” igual tiene margen para producirse. La caída de las acciones de la víspera fue importante, y la sobreventa que presentan en el corto plazo es muy profunda. No hay mucho más que perder en un día como este viernes, con horarios limitados.
En 2018, la guerra comercial entre Estados Unidos y China hacía estragos en la bolsa de Nueva York. La apertura de la sesión del 24 de diciembre fue caótica, y el índice Dow Jones quebró su tendencia alcista de largo plazo, proveniente de 2011. Media hora después de la apertura la guerra comercial quedó en el olvido, y el rally de este índice y otros como el S&P 500 y Nasdaq 100 se extendió hasta febrero de 2020, cuando comenzó la pandemia. Nada nuevo en los mercados.
Esta vez, la caída no es tan profunda, y se produjo por un PIB mejor de lo esperado, bajo el razonamiento de que la Fed podría extender sus aumentos de tipos de interés. La interpretación es poco seria. La Fed ya anunció, casi al detalle, cuales serán sus próximos pasos, y visto como actuó este año, será mejor creerle.
Nuestra interpretación, que no suele ser la misma, es que la caída del jueves anticipa un alza para este viernes, lo cual cumpliría la lógica del “rally de Navidad” y agregaría dudas a quienes ya las tienen.
Mientras tanto, y a favor de un alza general del dólar, al euro, la libra esterlina y el yen no les sobran motivos para el festejo. Las tres monedas principales han cedido en buena forma, en especial la libra, aunque con el atenuante de un alza de la bolsa de Londres.
El oro tampoco pudo sostener su impulso alcista de las últimas sesiones, y cae de 1800 dólares, aunque su destino alcista parece sellado; solo le falta confirmar el quiebre de 1840 dólares, nivel esquivo por ahora.
¿Será el deflactor de inflación lo que necesita la bolsa para revertir sus pérdidas del jueves? probablemente sí. Pero deberán apurarse. La sesión es corta.
Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, y un muy buen y reparador fin de semana, nos reencontramos el próximo lunes. Feliz Navidad.
Adrián Aquaro
Trader College