La bolsa de Nueva York cerró la semana pasada con fuertes ganancias, y con sus índices bursátiles principales en niveles que no tocaba desde abril pasado. Las acciones líderes se mantienen fuertes, y por el momento nada indica que esto vaya a cambiar en el corto plazo.
El nuevo rally de la bolsa tiene su principal motivación en la presunción de los mercados de que la Fed no seguirá ajustando la tasa de interés con el mismo nivel de intensidad con que lo hace actualmente, aunque ya está anunciado un aumento en septiembre, que se presume será del 0.75%.
El dólar mantiene su dominio en el mercado de divisas, pero ve limitada su capacidad de seguir creciendo como lo ha hecho hasta el mes pasado, cuando alcanzó nuevos máximos de 20 años ante el euro y de 26 años ante el yen. Si bien ambas monedas están lejos de sus mejores tiempos, la impresión es que tienen bastante para ganar en los próximos tiempos.
También las materias primas dan algunas señales positivas, al menos los metales. El oro recuperó la cota de 1800 dólares, y podría seguir avanzando en los próximos días, para acercarse a los 1825 dólares que mencionamos varias veces como un objetivo alcanzable, pero difícilmente superable en un primer impulso. Allí aparecerá un 38.2% de corrección de la baja 2070/1674 dólares.
La plata y el platino también operan con ganancias, aunque más moderadas. Particularmente el platino ofrece mejores perspectivas que la plata, con fuertes oscilaciones que lo acercan a los 1000 dólares, nivel que puede buscar próximamente.
Respecto al mercado de divisas, como queda dicho, el euro tiene un buen camino alcista por recorrer. Se acercan las próximas decisiones de política monetaria, tanto de la Fed como del Banco Central Europeo, y si bien faltan varias semanas, la impresión es que la Fed ya ha recorrido un camino que el BCE recién comienza a transitar. Si Europa consigue paliar aunque sea parcialmente los efectos del corte de gas impuesto por el gobierno ruso en represalia por las sanciones que la Unión le impuso a Moscú luego de la invasión a Ucrania, el euro podría comenzar un ciclo alcista mucho más marcado. El objetivo final del mismo es la zona de 1.13000.
Respecto a la libra esterlina, no parece tener un camino muy allanado, pero sí se ve con un mejor panorama que un mes atrás. El Banco de Inglaterra seguirá insistiendo con los aumentos de tipos de interés, ante una inflación que arrasa y se ubica por encima del 9% interanual. El PBI del segundo trimestre quedó debajo de 0, pero no tan mal como se esperaba, y eso le da señales de aliento a la tradicional moneda británica.
La semana tendrá como principal atractivo las Minutas de la Fed, previstas para el miércoles, y las ventas minoristas de julio, que probablemente encienda algún nivel de alarma para la economía estadounidense.
Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el martes.
Adrián Aquaro
Trader College