Si bien hubo una actividad reducida por el festivo en Estados Unidos, el mercado de divisas presentó algunas variaciones en el horario europeo, que luego se fueron diluyendo. El euro, por caso, logró algunas ganancias momentáneas que se borraron sobre el final de la sesión, pese a que crecen las chances de que el Banco Central Europeo eleve la tasa de interés en un grado mayor al previsto (0.25%) en su reunión de este mes.
Las cifras conocidas en Alemania, sobre todo su déficit comercial, limitaron al euro, que comienza a mirar nuevamente sus mínimos de junio (1.0348) como objetivo bajista cercano, apenas unos puntos por encima de 1.0340, un nivel que no toca desde enero de 2017, y cuyo quiebre podría incluso direccionar a la moneda a la paridad ante el dólar.
Solo la superación del por ahora muy lejano nivel de 1.0600 podría cambiar la tendencia bajista del euro, que no recibe ayuda de ningún tipo: el BCE prometiendo alzas de tipos muy moderadas; la guerra en Ucrania que ve a la Eurozona como uno de los bloques más perjudicados en materia económica; una inflación récord de varias décadas, y la propia embestida del dólar, que por ahora no tiene un final a la vista.
En tanto, la libra esterlina se vio más volátil, con un fuerte crecimiento en los horarios asiático y europeo, pero con una declinación de igual tenor sobre el cierre de dicha sesión, que posiciona a la moneda británica a la baja para las próximas horas. La libra quedó el viernes cerca de sus mínimos de más de 2 años debajo de 1.2000, nivel que recuperó rápidamente. Si busca nuevamente dicha cota, su quiebre puede ser de más larga duración.
El yen, por su parte, vuelve a caer frente al dólar, ante el dominio absoluto del billete, y pese a que tanto el petróleo como el gas natural, cuyos aumentos lo impulsaron a la baja en las últimas semanas, ven en duda sus respectivas tendencias de corto plazo. La moneda nipona había logrado alejarse de sus mínimos de 26 años la semana pasada, aunque retoma una dirección bajista en el corto plazo, lejos aún de 137.00, el máximo del par USD/JPY. El cruce no luce sobrecomprado, por lo que podría seguir avanzando durante gran parte del martes.
La onza de oro, en tanto, se mueve en un estrecho rango de precios, sin ceder de 1800 dólares, pero sin poder superar los 1820 dólares, a esta altura un nivel de resistencia importante. Por el momento, tanto la onza de oro, como el platino y la plata, están lejos de ofrecer señales de recuperación sustentable.
La bolsa de Nueva York retoma su actividad habitual este martes, luego de un viernes en el que logro mantenerse a flote. Los futuros de los índices Dow Jones, S&P 500 y Nasdaq 100 apuntan ligeramente al alza, aún cuando sus respectivas tendencias de mediano plazo se ven bajista.
El calendario de noticias del día incluye la declaración de política monetaria del Banco de la Reserva de Australia, a las 00:30 del este, con un alza del 0.5% en la tasa de interés, que podría quedar desde ahora en el 1.35%. Si esto se confirma, el Aussie tendrá un buen terreno para crecer, en momentos en que su debilidad es manifiesta.
Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el miércoles.
Adrián Aquaro
Trader College