Los hechos clave en los mercados financieros siguen produciéndose en el mercado del Tesoro americano. La Reserva Federal sigue centrada en volver a controlar la inflación y está preparando uno de los procesos de endurecimiento más rápidos de la historia.
Aparte de los índices PMI de actividad empresarial de la eurozona y del Reino Unido (que se publicarán el viernes), esta semana habrá pocos datos que muevan el mercado. Sin embargo, esta semana estaremos muy atentos a los discursos de los responsables de los principales banqueros centrales del mundo en un panel del FMI, incluido el del presidente de la Fed, Jerome Powell, el jueves.
EUR
El BCE dejó pasar la oportunidad de convencer a los mercados de que se está tomando en serio la inflación en su reunión de abril (celebrada la semana pasada). Los comunicados fueron en gran medida una reiteración de los de la reunión anterior, a pesar de que desde entonces todos los indicadores inflacionistas han empeorado. Sin embargo, parece haber una importante disensión en el seno del consejo, ya que fuentes del BCE filtraron que una subida de tipos en julio sigue siendo una posibilidad.
Además de a los índices PMI, esta semana prestaremos atención a la segunda vuelta de las elecciones francesas de este fin de semana. Esperamos que Macron gane las elecciones, tal y como predicen todas las encuestas, pero también pensamos que los mercados ya cuentan con este resultado y que tendrá poco impacto en el euro.
USD
La tranquilidad en los mercados de renta fija tras un informe de inflación ligeramente más suave de lo esperado duró poco. En los dos días siguientes, las fuertes ventas al por menor y una inflación de los precios de producción superior a la prevista hicieron ver que este episodio inflacionista aún tiene recorrido y que la Reserva Federal tiene mucho trabajo por delante para volver a tenerlo controlado. Los rendimientos estadounidenses siguen marchando inexorablemente al alza, lo que está ayudando al dólar frente a las divisas europeas, aunque no tanto frente a las de las relacionadas con las materias primas.
Esta semana, además de a los discursos de los miembros de la Reserva Federal, prestaremos mucha atención a las subastas de bonos del Tesoro del gobierno estadounidense. La venta de bonos a 20 años por valor de 16.000 millones de dólares el miércoles cobra especial importancia. Las subastas de la semana pasada no fueron bien, y es posible que EE.UU. tenga que hacer cada vez más concesiones para garantizar sus enormes necesidades de préstamo ahora que la Reserva Federal ya no compra bonos del Tesoro.
GBP
El informe de inflación de marzo del Reino Unido aumenta la presión sobre el Banco de Inglaterra para tratar de recuperar su credibilidad. Las sorpresas al alza en todos los subíndices clave llevaron la inflación a un nuevo máximo de 30 años, con la certeza de que la cifra del próximo mes será aún mayor. Los mercados esperan que el Banco de Inglaterra se vea forzado a dejar de lado su retórica dovish, y como resultado la libra esterlina terminó en la cima de la clasificación semanal del G10.
Este jueves tendremos discursos (que serán clave) en el panel del FMI por parte de los gobernadores Mann y Bailey. Cualquier matiz hawkish debería ser positivo para la libra, al igual que la fuerte expansión continuada que deberíamos ver en los índices PMI de actividad empresarial el viernes.