El mundo está pendiente de lo que sucede en el Este de Europa, con la invasión de Rusia a Ucrania, que ya se produjo de hecho en la víspera. Si bien no se han reportado hasta el momento enfrentamientos graves, la situación es absolutamente tensa, y mantiene a los mercados pendientes de cualquier novedad, por lo que los movimientos de los activos principales son muy lentos y cautelosos.
La bolsa de Nueva York había recuperado algunas posiciones el martes antes del mediodía americano, pero volvió a caer ante el anuncio de que Estados Unidos impondrá sanciones de orden económico a Rusia, en especial a algunos funcionarios y empresarios de fuerte influencia en el país.
Sin embargo, también la política monetaria de los bancos centrales entra en escena, y se desconoce que efecto pueda tener el conflicto actual con las mismas, en especial con las acciones que deberá tomar la Fed. El banco central prepara un alza de tipos de interés para la reunión de marzo, y la discusión pasa por si será de un cuarto de punto o medio punto. Algunos oficiales del FOMC bregan por varios aumentos de tipos de interés en 2022, lo cual podría darle, en el segundo semestre, un impulso alcista al dólar.
Claro que no solo la Fed se mueve. El Banco Central Europeo también prepara sus armas para los próximos meses, para enfrentar el mal que aqueja a la economía global, y que había desaparecido por décadas: la inflación. Con un índice cercano al 5% interanual, el BCE también deberá echar mano a aumentos de tasa de interés, aunque tradicionalmente sus acciones vienen bastante por detrás de las de la Fed. Por ello, antes deberá terminar con los planes de estímulo que por ahora se mantienen vigentes, pese a que uno de ellos finalizará en marzo.
El euro se mantiene expectante, en la zona de 1.1340, y el quiebre de 1.1365 podría darle un marcado impulso alcista durante la sesión americana de este miércoles, para buscar la zona de 1.1400.
Respecto al Banco de Inglaterra, también prepara un aumento de tasa de interés para marzo, que en su caso será el tercero consecutivo. La tasa quedará igualmente muy lejos de igualar una inflación que supera el 5% en Reino Unido, pero marcará el rumbo alcista de la libra esterlina para los próximos tiempos. La moneda británica no logra despejar claramente la zona de 1.3630, nivel cuyo quiebre definitivo podría llevarla a 1.3800 sin dificultades.
La onza de oro y el yen ceden posiciones en estas horas, producto de esta calma que impera en los mercados. La onza no parece tener mucho más para perder, y la zona de 1880 dólares puede ser el soporte que necesita para volver a apuntar alto.
En cuanto al yen, cayó con fuerza en las primeras horas de este miércoles, y el par USD/JPY quebró una línea bajista que puede extender la baja de la divisa nipona a la zona de 115.50 durante las próximas horas. Claro está, un agravamiento en el conflicto mencionado cambiará totalmente el panorama en muy poco tiempo.
La agenda de noticias no tiene datos importantes, y la apertura de Wall Street, a las 9:30 del este, será clave para determinar la tendencia del dólar en el corto plazo.
Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el jueves.
Adrián Aquaro
Trader College