Después de una larga lucha, la bolsa de Nueva York logró revertir parcialmente la baja sufrida durante buena parte del mes de enero. No todo, claro, pero al menos logró recuperar un 50% de sus pérdidas del mes, luego de que a inicio del mismo el índice Dow Jones llegara a máximos históricos. No es poco, para un mes que pintaba para un desastre en la bolsa.
El dólar ofreció sus típicas oscilaciones anteriores y posteriores a los comunicados importantes de la Fed. Si bien en la reunión del pasado miércoles no se tomaron decisiones inmediatas, quedó todo listo para iniciar un ciclo de alzas de tipos de interés en marzo, en ocasión del próximo encuentro del banco central. Al tiempo, quedarán sin efecto los planes de estímulo, y comenzarán las ventas de bonos. La postura agresiva de la Fed, que parece tomada a regañadientes y a pesar del mal humor que la misma generó en los mercados, llevó al dólar a máximos de casi dos años ante el euro, y máximos de más de un mes ante la libra. Cerca, a su vez, estuvo de quebrar su propio máximo de cinco años ante el yen, que finalmente logró torcer su destino bajista de corto plazo sobre el cierre de las operaciones del lunes.
Y no solo el yen se revitalizó. También el euro, y la libra esterlina, lograron escapar a sus mínimos, para posicionarse al alza en este inicio de febrero. Acompañando el rally de las acciones principales, las monedas europeas, y también las vinculadas a las materias primas comenzaron a cobrar vida, luego de varios días de dudas.
El oro, que también se había visto depreciado en buena forma desde sus máximos de varios meses de la semana anterior en 1852 dólares, intenta recuperar, con dificultades, la cota de 1800 dólares, sobre la cual pivotea una y otra vez. Es claro que el oro tiene tres zonas bien definidas de parada, que son 1800, 1830 y 1860 dólares, con un fuerte soporte en la zona de 1780 dólares.
En medio de este clima de negocios algo inestable, pero que evidentemente cambió para mejor en las últimas sesiones, es que se inicia un mes de febrero cargado de informes y eventos.
El primero ya fue conocido: el Banco de la Reserva de Australia dejó sin cambios los tipos de interés, con el mismo efecto limitado que suelen tener sus decisiones sobre una moneda sumamente estable como el Aussie, siempre más pendiente del delicado vínculo de Australia con China que de las decisiones de política monetaria del banco central. La inflación apremia, y pueden producirse alzas de tasa en los próximos meses, para lo cual habrá que ver que hace la Fed, banco al cual los demás suelen seguir.
A las 10:00 del este se conocerá el ISM de manufacturas. Lejos de sus mejores momentos, que tuvieron lugar a mediados de 2021, la medición igualmente se sitúa al alza, con unos 57 puntos esperados. La reacción de los mercados será muy modesta.
Será entonces en la apertura de Wall Street cuando se produzcan los movimientos más importantes en el mercado. Si los índices logran mantener su tono alcista, que lógicamente será reflejo de un buen momento de las acciones, el dólar tendrá el camino libre para seguir cayendo, y por unos cuantos días.
Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el miércoles.
Adrián Aquaro
Trader College