Los vaivenes de la bolsa de Nueva York marcan el pulso de los mercados. Esta situación, que es habitual, se acentúa en estos últimos días, y así tuvimos un miércoles con marcados movimientos en los pares principales de divisas.
El dólar vuelve a imponer sus condiciones, con el euro y la libra que lentamente se acercan a nuevos mínimos. Esto atañe, en especial, a la moneda única, que tiene debajo de los niveles actuales sus mínimos del año, que alcanzó el pasado 13 de octubre en 1.1520.
La libra, con todo, se mantiene más firme, pese a que los últimos nubarrones del Brexit limitan el crecimiento de la divisa británica. La cuestión de Irlanda se mantiene pendiente, y la falta de acuerdo entre Reino Unido y la Unión Europea puede tener algún impacto en los próximos tiempos. De todas formas, la posibilidad cierta de que el Banco de Inglaterra eleve sus tipos de interés en la primera parte de 2022 mantiene a la libra mucho más fuerte que el euro.
Pero este jueves es el turno del anuncio de política monetaria del Banco Central Europeo. La entidad que comanda Christine Lagarde dará a conocer su comunicado a las 7:45 del este, tras lo cual, a partir de las 8:30, habrá una conferencia de prensa a cargo de la funcionaria.
En principio, nada nuevo se espera del anuncio del BCE. Lagarde, en sus dos años de mandato, logró mantener a los mercados en calma durante sus presentaciones, algo que ni siquiera el gran Mario Draghi logró en forma homogénea. Las conferencias que brinda Lagarde abundan en cifras y anuncios muy ambiguos, y dado que no se esperan cambios relevantes, las oscilaciones del euro suelen ser escasas.
Justamente, en esa falta de reacción del banco central es que puede residir una nueva baja del euro. La inflación de la Eurozona supera el 3%, algo que a la Fed se le critica en forma constante y con crudeza. Sin embargo, los mercados no han reaccionado de la misma forma con el BCE, que ni siquiera se plantea comenzar a recortar parte de los fondos que coloca en la economía. Claro está, los montos son otros, y la complejidad de la Eurozona también.
Por otra parte, en Estados Unidos se conocerá el PBI avanzado del tercer trimestre. La medición (primera de tres) volverá a ofrecer cifras más acordes a las que la primera potencia global ofrece habitualmente, con un crecimiento del 2.6% esperado. Se terminan las artificiales “tasas chinas” que abundaron durante gran parte del año, producto del desastroso 2020, parcialmente recuperado en 2021. El dato se conocerá curiosamente a la misma hora en que comenzará a hablar Lagarde, por lo que habrá un alto impacto en los precios del dólar.
La moneda estadounidense domina a voluntad el mercado de divisas, y la única duda, por el momento, la deja el yen, que si bien cae, lo hace a menor velocidad y con una inminente recuperación en todos los frentes. Claro, mientras la bolsa de Nueva York no corrija más que un puñado de puntos, el yen no tendrá mucho por avanzar. Pero hay que recordar que el miércoles próximo hablará la Fed. Y allí cualquier cosa puede pasar.
Respecto a las acciones, a la fiesta de Tesla se agregaron Google y Amazon, ambas con fuertes ganancias en el trimestre anterior, con cifras muy esperadas por los inversores. Nueva York sigue de fiesta y, por lo visto, nadie quiere que termine.
Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el viernes.
Adrián Aquaro
Trader College