Los mercados mantienen una fuerte expectativa en torno al discurso que pronunciará el próximo viernes el presidente de la Fed, Jerome Powell, en el contexto del Simposio de Jackson Hole. Es verdad que todos los años se genera este suspenso, aunque en esta oportunidad el mismo se ve exacerbado por la probabilidad de que el banco central comience a recortar los planes de estímulo actuales.
Sobre este particular, hay varias corrientes de opinión. La más fuerte es que Powell dejará las puertas abiertas para un recorte en la reunión de septiembre, algo que en principio parece lógico, luego de que en la reunión de julio dijera que habría anuncios antes de tomar acción en este sentido. Jackson Hole aparece, pues, como una buena chance para hacer estos anuncios.
Otros sugieren que ante la expansión de la variante delta del virus, que está llevando al sistema sanitario estadounidense a tener problemas nuevamente, y con un nivel de más de 120 mil casos diarios de contagio, la Fed postergará cualquier decisión de fondo, manteniendo los planes actuales por tiempo indefinido.
Con este panorama, Wall Street mantiene a sus índices principales en muy altos niveles, cercanos a los máximos históricos, con las acciones líderes que apenas ceden posiciones, como sucedió en la víspera.
Esto limita al dólar, que si bien ensaya ahora mismo una recuperación en casi todos los frentes, ha cedido posiciones ante el euro, la libra, y sobre todo ante el dólar canadiense y el dólar australiano, dos monedas vinculadas a las materias primas. El Loonie, en especial, se muestra fuerte en estas horas, con un precio de 1.2603, aunque perdiendo algo de velocidad antes del inicio de la sesión americana.
Respecto al oro, otra vez ha perdido la cota de 1800 dólares, un nivel que le está resultando sumamente esquivo, y cotiza a 1796 dólares, con una perspectiva bajista en el corto plazo. El oro se mueve con un comportamiento muy irregular en estos días, como a la espera de anuncios importantes ¿Serán los de la Fed?
La agenda del día incluye las órdenes de bienes durables de julio en Estados Unidos, un dato que es clave, pero que no tiene impacto en los mercados por publicarse casi con un mes de atraso. Esta vez, al igual que las ventas minoristas, este informe podría mostrar una declinación, lo cual a su vez puede reforzar la presunción de que la Fed no va a tomar acción con sus planes de estímulo.
Respecto a lo ya conocido, la encuesta IFO de clima de negocios en Alemania, dato que en su hora supo ser el más importante de Europa, apenas movió al euro a la baja. La encuesta quedó en 99.4 puntos, con una tercera baja consecutiva. Esto resulta bastante previsible, con Europa tratando de salir de la crisis actual, pero con el virus que se empeña en atacar en diversos países, en especial en Alemania, donde la cuarta ola de contagios no ofrece tregua.
Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el jueves.
Adrián Aquaro
Trader College
