La bolsa de Nueva York recuperó una buena parte de sus pérdidas de inicio de semana el martes, pese a que las condiciones en que se han desarrollado los mercados no han variado. La preocupación por la variante Delta del virus, que se expande a gran velocidad, se ha incrementado en las últimas horas, con récord de contagios en diversos países, aunque con un nivel de letalidad que, al menos en apariencia, es menor.
Por otro lado, la incertidumbre sobre las próximas acciones de política monetaria de la Fed se mantiene intactas. La gran pregunta que los operadores se hacen ahora mismo es cual será el tenor del comunicado que emitirá el banco central el próximo miércoles.
Respecto a la cuestión de los contagios, la libra esterlina aparece como la moneda más golpeada, luego de quebrar la zona de 1.3600 durante la sesión de la víspera. La cota de 1.3500 aparece cada vez más cerca, y en la medida en que se agrave la cuestión sanitaria, la divisa británica tendrá muy poco por ganar.
El euro, en cambio, aparece más estable. Faltan solo 24 horas para la reunión del Banco Central Europeo, y habrá poca amplitud de precios en los pares de la moneda única, que intentará no perder mucho más de lo que ya lo ha hecho, al menos hasta que la titular del BCE, Christine Lagarde, termine con su habitual conferencia de prensa.
El dólar canadiense, en tanto, se ve beneficiado por un rebote, por ahora técnico, del petróleo. La fuerte baja que sufrió la materia prima en las últimas sesiones llevó al Loonie a rozar 1.2800, para recuperar una buena parte de sus pérdidas recientes en muy pocas horas. Paradójicamente, el Banco de Canadá anunció días atrás que reduce su compra de bonos, pero esto no le alcanzó a la moneda local para mantenerse a flote, tal ha sido la embestida del dólar.
La onza de oro, en tanto, se mueve sin un rumbo claro. Lejos de los máximos del mes en 1833 dólares, el metal precioso presenta movimientos tan erráticos como bruscos, cambiando de tendencia en pocos minutos. Para consolidar una tendencia alcista más sustentable, la onza deberá posicionarse sobre los 1825 dólares en el corto plazo, lo que le dará lugar a un movimiento alcista más previsible.
Los pares del yen, moneda que se mueve, al igual que el franco, en dirección casi contraria al euro y la libra esterlina, presentan alternativas muy interesantes. En situaciones como la actual, los cruces EUR/JPY y GBP/JPY toman protagonismo, y brindan buenas señales. En nuestra opinión, ambos pares tienen un camino bajista por delante, que se puede aprovechar.
Es claro que el humor de los mercados, ante una agenda de noticias que ofrece muy poco, pasa por lo que ocurre en la bolsa de Nueva York. De allí es que este miércoles, a partir de las 9:30 del este, es donde se definirá si el dólar puede consolidar sus ganancias, lo que en otras palabras significa una nueva baja de las acciones, o si vuelve a ceder posiciones, algo poco probable, al menos en un gran tenor.
Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el jueves.
Adrián Aquaro
Trader College