En este artículo vamos a centrarnos en algo fundamental, realizar inversiones rentables.
Hay muchísimos tipos de inversión, aunque en este artículo nos centraremos en la inversión en bolsa.
Mucho hemos hablado ya de la inversión en bolsa, pero hay cosas que siempre se tienen que recordar.
Una de ellas son los errores que no debes cometer si quieres tener éxito invirtiendo.
Y es que, como dijo Warren Buffett, la regla nº1 en la inversión es no perder dinero, y la regla nº2 es nunca olvidar la regla nº1.
Los 4 errores que debes evitar si quieres realizar inversiones rentables sin dormir mal
#1 – Piensa bien qué quieres conseguir y cuáles son tus necesidades y situación
Este es el primer paso, y es fundamental.
En muchas ocasiones se empieza la casa por el tejado, y en el mundo de la inversión pasa lo mismo.
Puede que hayas decidido que quieres empezar a invertir, y que tengas prisa por empezar.
Es normal, pero no se puede ir tan rápido.
Primero debes pensar bien en tu situación y analizarla, para así tener claro qué hacer.
Para lograr inversiones rentables debes tener claro cosas como las siguientes:
- A que plazo vas a invertir
- Cuánto dinero vas a invertir
- Cuánto tiempo le quieres dedicar a tus inversiones
- El riesgo que quieres asumir
- Cuál es tu objetivo
Todos estos factores definirán algo fundamental, y que tienes que tener sí o sí si quieres invertir tu dinero con éxito, tu estrategia de inversión.
#2 – Define bien tu estrategia de inversión
Una vez tengas clara tu situación, tus objetivos y tu forma de ser, podrás pasar a definir tu estrategia.
No puedes hacerlo antes, porque no invertirá igual alguien que quiera invertir a un plazo de 2 años que alguien que tenga 20 años por delante.
Tampoco invertirá igual alguien que quiera un riesgo moderado que alguien que quiera arriesgar mucho para maximizar la rentabilidad.
Ni alguien que quiera dedicar mucho tiempo a sus inversiones, analizar los resultados empresariales, etc. comparado con alguien que no quiere dedicar ni un minuto a sus inversiones.
Por tanto, en función de tus criterios y de tus preferencias, deberás optar por una estrategia de inversión u otra.
No tiene sentido que si no quieres arriesgar inviertas en criptomonedas, por ejemplo.
Decide una estrategia de inversión que se adapte a ti, y síguela indefinidamente.
#3 – No te dejes llevar por tus sentimientos si quieres lograr inversiones rentables
Es relativamente fácil escoger una buena estrategia de inversión, pero por desgracia seguirla no es tan fácil.
Claro, es fácil seguirla cuando todo va bien, y todo sigue el plan trazado.
El problema es cuando las cosas se tuercen, y créeme, si inviertes a largo plazo, las cosas se torcerán.
Normalmente, cuando más se tuercen es cuando entran los sentimientos en juego, tu peor enemigo cuando inviertes tu dinero.
En concreto, el miedo y la codicia.
El miedo aparece cuando la bolsa baja mucho, y parece que nunca dejará de bajar.
La codicia, en cambio, aparece cuando la bolsa sube mucho, y parece que nunca dejará de hacerlo.
En esos momentos seguir la estrategia ya no es tan fácil, porque los inversores se dejan llevar por sus sentimientos, y hacen cosas que no deberían hacer si siguieran su estrategia.
Lo importante es recordar que, aunque parezca que algo bajará para siempre, no lo hará, y cuando parezca que algo subirá para siempre tampoco lo hará.
La historia nos ha enseñado eso, y es que la bolsa es cíclica.
Debes seguir siempre tu estrategia, sin dejarte llevar por tus emociones y por las emociones del mercado.
Eso no implica que solo puedas tener una estrategia de inversión.
Puedes tener una para el 90% de tu dinero, por ejemplo, con riesgo moderado, y una para el 10% restante, con un riesgo más elevado.
Lo importante es no mezclarlas, y tenerlas claras.
#4 – Nada es para siempre, sé flexible
Si inviertes a corto plazo no pasa nada, pero si inviertes a largo plazo tienes que tener claro que la vida cambia.
No puedes marcar una estrategia de inversión ahora y que te sirva 40 años.
Puede que algunas partes sirvan, pero no todo, y es que la vida cambia mucho.
Debes seguir tu estrategia sin dejarte llevar por los sentimientos, pero eso no significa que no puedas modificarla.
Siempre hay cambios, y debes adaptarte a esos cambios, y estar más o menos al día de lo que sucede, para así conseguir mejorar tu estrategia y lograr inversiones más rentables.
Invertir es fácil, pero hay muchas trampas por el camino. Espero que este artículo te haya ayudado a evitar algunas de ellas.