Si bien era previsible, la corrección bajista del dólar se está extendiendo algo más de lo esperado. Ello a pesar de que el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, se mostró ante la comisión encargada de seguir la pandemia en el Congreso con el mismo tono entre moderado y optimista con que se expresó la semana pasada al cabo de la reunión del banco central. Ante un tono similar, el mercado eligió esta vez dejar de lado al dólar. Al cabo, la Fed solo anunció lo que hará dentro de un año y medio, y es mucho tiempo para lamentarse por anticipado.
La moneda norteamericana, de todos modos, está lejos de rendirse en el corto plazo. Bastará que el euro caiga de 1.1900 y la libra de 1.3850 para que otra vez el billete tome fuerza sin demoras. El yen ya está anticipando que lo que le espera no es fácil, llegando a 111.00, nivel poco esperable pocas semanas atrás. El oro, el otro activo de refugio, se queda mirando desde afuera la fiesta de la búsqueda de riesgo de los inversores.
La bolsa de Nueva York también se muestra fuerte, y con pocas chances de sufrir fisuras. Los futuros del Nasdaq 100 no dejan de tocar máximos históricos, y el S&P 500 no tardará en hacerlo, en tanto ahora los del Dow Jones, que supieron liderar el actual rally de las acciones, ahora “corren de atrás” a los otros índices.
La incógnita del día es ver si el dólar será capaz de recuperarse rápidamente de este traspié, o si comienza un nuevo ciclo bajista. Todo indica que finalmente terminará ganando la batalla de corto plazo, pero los movimientos del lunes y martes fueron bastante profundos como para tomarlos como una sencilla corrección.
En cuanto al calendario del día, se publicará este miércoles las previsiones de manufacturas y servicios de Markit, datos sumamente importantes para los mercados. Ya se conocieron las mediciones en Alemania y la Eurozona, confirmando la expansión de ambos sectores, en máximos de varios meses.
Para Estados Unidos, los mismos datos se conocerán a las 9:45 del este, se esperan guarismos similares a los de mayo. El mes pasado, ambas mediciones arrojaron sus mejores cifras desde que se publican, superando el de servicios los 70 puntos, luego de una medición de 60 puntos en abril. También en este caso, y con mayor fuerza, se observa la expansión de ambos sectores de la economía.
De estos datos dependerá la dirección que tome una bolsa de Nueva York que por ahora aparece imparable. Si los datos del día salen como se espera, no hay motivos para pensar en un cambio, y a su vez, esto podría volver a impactar negativamente en el dólar.
Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el jueves.
Adrián Aquaro
Trader College
