La sesión del lunes solamente dejó para el análisis una corrección bajista de la bolsa de Nueva York, que llegó sobre el cierre de la rueda, a la cual se sumó, lógicamente, un alza del dólar. Este movimiento no alcanzó a cambiar el claro sesgo bajista de la moneda norteamericana, que se mantiene débil en todos los frentes. Además, esta corrección pierde fuerza en estos momentos, mientras promedia la sesión europea del martes.
La gran sobrecompra que presentaban los índices Dow Jones y S&P 500 el lunes tornaban inminente una toma de ganancias, que finalmente llegó sobre el cierre de la sesión. En cambio, el índice Nasdaq 100 ya venía perdiendo posiciones desde varios días atrás, y su alza del viernes solo había servido para corregir parcialmente sus pérdidas. Lo que en la práctica sucede es que los grandes fondos de inversión liquidan sus posiciones en acciones tecnológicas, las grandes beneficiadas por la pandemia, en la presunción de que lo que viene puede ser una baja profunda en Wall Street.
En otro orden, varios oficiales del Comité de Política Monetaria de la Fed (FOMC) se presentan en estos días, para dar a conocer su punto de vista sobre las acciones que el banco central debe tomar en su próxima reunión de junio. Son varios los que opinan que el rebrote inflacionario es pasajero, y que la inflación volverá a sus niveles cercanos al 2% con el paso del tiempo. Sin embargo, el dato que se conocerá el miércoles puede generar una nueva preocupación en los mercados, sobre todo si el índice general supera el 2.6% publicado en marzo, algo que muy probablemente ocurra.
Los datos de empleo de abril, conocidos el viernes, y que decepcionaron a los analistas del sector, pueden poner un paño frío sobre la presión que se ejerce sobre la Fed, que defiende a capa y espada su política de seguir inyectando 120 mil millones de dólares mensuales.
En este contexto, el euro se acerca a su máximo del lunes de 1.2180, y el quiebre del mismo llevará a la moneda única a 1.2210, su próxima resistencia. Sobre la misma se ubica 1.2230, nivel desde donde podría iniciar una corrección bajista más importante.
La libra esterlina, en tanto, presenta un panorama alcista más pronunciado, con un precio actual de 1.4115, y buscando los máximos de la víspera en 1.4160. En su caso, la libra presenta un nivel de sobrecompra muy marcado en el corto plazo, que puede limitar ganancias adicionales sobre los máximos mencionados.
El yen, siempre más prudente, se mueve en torno a 108.85, con el par USD/JPY formando un triángulo simétrico de continuación de tendencia bajista en el gráfico de 4 horas, pero que solo quedará confirmado al quiebre de 108.60. Por el momento, la divisa nipona no brinda muchas pistas, y cae con fuerza tanto ante el euro como ante la libra.
El oro llegó a un nuevo máximo desde febrero en 1844 dólares el lunes, para estacionar ahora en 1836 dólares, con una llamativa quietud en las últimas velas de 4 horas. El quiebre del máximo mencionado acelerará su alza, aunque la zona de 1850 dólares será un fuerte obstáculo para el metal precioso. Creemos que puede producirse una corrección bajista, probablemente a la zona de 1826 dólares, antes de iniciar un nuevo ciclo al alza.
Sigue muy fuerte el dólar canadiense, apuntalado por las medidas del Banco de Canadá y por el petróleo, y haciendo caso omiso al muy mal dato de empleos de abril conocido el viernes. El Loonie tiene ahora su principal objetivo en los máximos de septiembre de 2017 en 1.2060, antes de iniciar una corrección bajista importante.
Amigos, tengan todos una excelente jornada de operaciones, nos vemos el miércoles.
Adrián Aquaro
Trader College