A pesar de que los inversores prestan cada vez más atención a la creciente volatilidad de los mercados de tipos, el mercado de divisas continúa moviéndose, principalmente, en función del apetito de riesgo y del precio de las materias primas.
La reunión de marzo de la Reserva Federal de este miércoles será el tema central de esta semana. Si bien no se espera ningún cambio en política monetaria, los mercados se fijarán en la reacción al importante aumento de los rendimientos de bonos a largo plazo y al notable salto en las expectativas de alza de tipos de interés para el año 2023, que están en desacuerdo con el propio pronóstico de la Reserva Federal. La reunión del Banco de Inglaterra del jueves completará la semana en el G10.
GBP
Es difícil obtener una lectura sobre el verdadero estado de la economía del Reino Unido en este momento, ya que las cifras están oscurecidas no solo por los confinamientos sino también por la, quizás temporal, caida en el comercio con la UE debido al Brexit. El liderazgo global del Reino Unido en cuanto a vacunaciones ha fortalecido a la libra, particularmente frente al euro, pero parece ser que esto ya esté completamente descontado, con la libra esterlina cotizándose en un rango estrecho sin mucha convicción contra la moneda común o el dólar americano. La reunión del Banco de Inglaterra de esta semana en realidad puede resultar de apoyo para la libra esterlina. Se espera que el MPC haga sonar un tono más optimista, dado el éxito del programa de vacunación y el paquete de apoyo fiscal relativamente agresivo anunciado por el gobierno de Johnson.
EUR
A diferencia de la Reserva Federal, el BCE dejó claro que le preocupa la subida de los rendimientos y su posible impacto en la recuperación económica. Anunció que adelantará las compras de bonos soberanos en el marco del programa PEPP para combatir la tendencia alcista de los rendimientos de bonos europeos. Sorprendentemente, ni este anuncio significativo ni el pobre ritmo de vacionaciones en Europa y de redución de casos afectaron mucho al Euro, que terminó la semana en el medio del tablero de divisas frente a sus principales pares, más notablemente el dólar americano. Creemos que la capacidad de recuperación es significativa y vemos el potencial de un repunte del euro si el esfuerzo europeo de vacunación finalmente se pone en marcha.
USD
La renta fija estadounidense continuó su liquidación la semana pasada. Sin embargo, los movimientos fueron relativamente modestos y las grandes subastas de bonos del Tesoro no rompieron los mercados. Si bien la inflación de febrero fue aproximadamente como se esperaba, otros datos de alta frecuencia, como las solicitudes semanales de subsidios por desempleo, generalmente superaron las expectativas. Como explicamos anteriormente, la clave para el dólar americano esta semana será la reunión de la Reserva Federal. Estaremos observando muy de cerca la actualización de las proyecciones económicas del FOMC y cualquier intento de hacer retroceder el aumento de los rendimientos de los bonos. En particular, estaremos también atentos a cómo se plantea la discrepancia entre las propias previsiones de la Reserva Federal de que no habrá aumentos de tipos de interés hasta 2023 y las de un mercado que ha comenzado ya a descontar un alza total a principios de 2023.