El fundador y director ejecutivo de Tesla, Elon Musk, ha demostrado varias veces que sus críticos se equivocaban. Entre otras cosas, Musk es conocido por comentarios escandalosos, a veces controvertidos, durante las entrevistas y a través de Twitter. Aun así, las acciones de su compañía de automóviles eléctricos han subido un 400% durante los últimos 12 meses, lo que la convierte en la compañía de mejor rendimiento del S&P 500.
El mes pasado, Tesla publicó unos resultados trimestrales que marcaron un sexto trimestre consecutivo de rentabilidad y cerraron un año fiscal en el que las entregas de automóviles alcanzaron las 500.000 unidades, un 36% más que el año anterior. Tras presenciar un éxito tras otro, incluso algunos de los bajistas que más se hacen oír de Tesla capitularon, admitiendo que se equivocaron al recomendar una “Venta” de las acciones.
«No hay otra manera de decirlo ms que reconociendo que estábamos completamente equivocados con respecto a las acciones de Tesla», escribía Joseph Spak, analista de RBC Capital Markets, el mes pasado. Chris McNally, analista de Evercore ISI, ha dicho que ha estado:
«… en el lado totalmente equivocado de Tesla desde hace más de un año.
De hecho, McNally casi triplicaba su precio objetivo de las acciones de Tesla hasta 650 dólares. Al mismo tiempo, Dan Levy, analista de Credit Suisse Group AG, duplicó su precio objetivo a 800 dólares. Las acciones cerraron el viernes en 816,12 dólares.
Estas sinceras admisiones por parte de la comunidad en cuanto a la recomendación de venta, sin embargo, no quitan que siga siendo difícil ver las razones de algunos de los últimos movimientos de Musk.
Lo que más ha llamado la atención actualmente es su reciente apuesta por las criptomonedas utilizando el efectivo de Tesla para hacer la inversión. En una presentación ante la SEC publicada el 8 de febrero, el fabricante de automóviles con sede en Palo Alto, California, revelaba que había comprado 1.500 millones de dólares en bitcoins, con el fin de diversificar su depósito de efectivo.
Tesla también ha dicho en el anuncio que en algún momento planea permitir a los clientes comprar sus coches con bitcoins.
Los movimientos salvajes del Bitcoin
Al entrar en este segmento altamente especulativo del mercado, Musk ha puesto en juego 1.500 millones de dólares de los aproximadamente 19.000 millones en efectivo que había en el balance de Tesla a finales de diciembre. El fabricante de vehículos eléctricos recaudó 12.000 millones de dólares en la venta de capital adicional mientras planeaba una agresiva expansión.
A pesar de su reciente aumento de valor, el bitcoin sigue siendo una clase de activos altamente volátil con un futuro impredecible. La moneda puede subir o bajar un 20% en un solo día, a veces sin razón aparente.
El mes pasado, el organismo de vigilancia financiera del Reino Unido, la Autoridad de la Conducta Financiera, advirtió de que invertir en activos criptográficos, o las inversiones y préstamos vinculados a ellos, generalmente implica asumir riesgos muy elevado con el dinero de los inversores. «Si los consumidores invierten en este tipo de productos, deberían estar preparados para perder todo su dinero», dijo el organismo regulador.
Si bien los activos digitales son relativamente nuevos, la historia financiera sugiere que el uso especulativo similar de los fondos de una empresa industrial ya ha ocurrido antes, y generalmente ha terminado mal, explica Charley Grant, redactor de opinión del Wall Street Journal en una pieza reciente.
Como ejemplo, Grant ha señalado que hace un siglo, General Motors requirió un rescate debido a las actividades especulativas de las acciones de su fundador William Durant. En la década de 1980, la especulación corporativa generalizada sobre los precios del suelo japonés ayudó a impulsar una burbuja bursátil que finalmente colapsó.
Junto con las críticas generalizadas al movimiento criptográfico de Musk, los inversores en acciones de Tesla tienen otras razones para preocuparse. La reducción de los márgenes de beneficio, la dura competencia en China y Europa y algunos problemas de calidad relacionados con los coches de Tesla son algunos de los vientos en contra que se vislumbran en el horizonte.
El mes pasado, Tesla dijo a los inversores que sus márgenes operativos se redujeron al 5,4% en el último trimestre, frente al 9,2% de los tres meses anteriores, debido a los recortes de precios en China, los costes de la cadena de suministro y un gran paquete de pago otorgado al director ejecutivo Musk y otros ejecutivos clave.
Tesla fue convocado recientemente por los reguladores chinos para responder a las quejas sobre problemas de calidad y seguridad con sus coches. China es un componente crucial de la historia de crecimiento de Tesla, ya que los ingresos en Estados Unidos parecen haber alcanzado su punto máximo, al menos a corto plazo.
¿Significa esto que el impresionante repunte de Tesla está llegando a su fin después de impulsar una aceleración del 1.000% del valor de sus acciones desde marzo? Algunos analistas lo creen. Según RBC Capital Markets:
«En vista del rumbo de la empresa, la ‘pérdida” indicada en los resultados, la ausencia de orientación específica para 2021 y las posibles restricciones del suministro, las acciones podrían tomarse un respiro. Pero, para los creyentes a largo plazo, es probable que haya poco que les haga cambiar de opinión».
Sus analistas ahora asignan un precio objetivo de 725 dólares por acción a las acciones.
En conclusión
Para los inversores que hayan tenido acciones de Tesla durante esta pandemia, los resultados han sido llamativos. Sin embargo, eso no justifica que un fundador arriesgue el dinero de los accionistas en una apuesta altamente especulativa en un segmento del mercado que sigue siendo volátil e impredecible. En nuestra opinión, Tesla sigue siendo una de las acciones más especulativas de Wall Street. Eso por sí solo debería justificar la precaución de cualquier persona que tenga u opere con acciones de la empresa.
Haris Anwar/Investing.com
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